Frente a los tacones imposibles o los modelos extravagantes que ahora se estilan, en Pitillos fabrican zapatos cómodos. Reivindican que ese confort no está reñido ni con el buen diseño ni, por supuesto, con la calidad. Desde hace unos años Silvia Hernández está al frente de la empresa. Su padre, Juan Antonio, un comercial de zapatos riojano, la fundó en 1981. Montó un pequeño taller en Arnedo y al poco tiempo consiguió su primer gran encargo: serigrafiar la imagen del icónico Naranjito del Mundial del 82 en las zapatillas deportivas. La popularidad de la mascota les ayudó a darse a conocer. Poco a poco empezaron a producir y fueron ampliando sus líneas y clientela. En la actualidad tienen presencia en 35 países y más de 4.300 puntos de venta en todo el mundo.
Pitillos reivindica que su calzado está hecho en España. ¿El ‘made in Spain’ sigue aportando valor fuera?
El ‘made in Spain’ sigue proporcionando nuevas oportunidades y abriendo puertas. España es uno de los países donde se fabrica mejor calzado gracias a que tenemos un personal altamente cualificado. Desde los inicios nosotros hemos apostado por el diseño y la estética asociándolos a la comodidad. Es lo que nos diferencia. Nuestro calzado está fabricado en España y se caracteriza por ser atemporal y estar elaborado a partir de materiales de primera calidad. Creemos que es imprescindible invertir, ya que es lo que determina la duración de un buen zapato.
Vendéis en España, pero también fuera. ¿Dónde principalmente?
Producimos íntegramente en Arnedo y alrededor del 20% se comercializa fuera, destacando los mercados asiáticos, rusos y también latinoamericanos, especialmente, México, Brasil y Argentina. Estamos trabajando para ampliar la cuota de mercado en países europeos sobre todo, porque en España ya contamos con más de 3.000 puntos de venta. Entre nuestros objetivos para este año destacan la expansión y consolidación en países como Alemania o Francia.
En los últimos tiempos la compañía intentado renovarse y acercarse a un público más joven. ¿Con buenos resultados?
La colección ha aumentado y, por consiguiente, el abanico de clientela, público potencial y objetivo, también lo ha hecho. Nuestros modelos respiran un aire más joven, dinámico y moderno, sin perder características como el binomio confort y estilo. Los resultados generales son tremendamente positivos desde el lanzamiento desde que hace un par de campañas lanzamos estos nuevos modelos. La verdad es que estamos muy satisfechos con la aceptación de las nuevas líneas.
¿Qué te parece la tendencia de los ‘ugly shoes’?
Personalmente me parecen creación innovadora y potente, pero creo que son una moda pasajera. Todos entendemos la moda como arte, y ahí encajan los ugly shoes, diseñados para un público joven que devora moda como elemento diferenciador que muestra sus gustos y actitud ante la vida.
Dice Leandra Medine que en cuestión de zapatos la comodidad es un estado mental. ¿Estás de acuerdo?
Leandra siempre me ha fascinado. Su visión en clave de humor sobre la moda me parece imprescindible, aunque esta afirmación tengo que rebatírsela. Pitillos es un claro ejemplo de que diseño y confort pueden formar parte de la misma ecuación. Tanto en modelos para una working girl como en los zapatos más elaborados para eventos y los clásicos para nuestras clientas más exigentes y con los pies castigados. Opino que en cuestión de zapatos la comodidad es primordial.
¿Tú usas más tacones o zapato plano?
Los planos también me fascinan, los oxfords son mis favoritos, pero soy más de zapatos de tacón. Me conquistan los estampados, las combinaciones de tejidos o las alturas diferentes, integrando plataformas. Y los llevo durante las largas jornadas de trabajo, por lo que necesito que diseño y confort vayan de la mano.
