8 pueblos aragoneses que merece la pena conocer
Nuestro recorrido por los pueblos más bonitos de España continúa
España está llena de pueblitos rebosantes de encanto en los que se respira aire puro y tranquilidad, ideales para pasar unos días. Este año hemos querido hacer un pequeño recorrido por algunas de los más bonitos de Andalucía, Cataluña, Galicia o Cantabria, y hoy vamos a adentrarnos en los de Aragón.
Sos de Rey Católico (Zaragoza)
Asentado sobre una imponente roca, este municipio de origen medieval fue declarado conjunto histórico-artístico en 1968. Sus calles empedradas, la judería, la plaza de la Villa o el castillo son algunos de sus atractivos. El pueblo fue el escenario de la película La Vaquilla, de Luis García Berlanga. Por eso, junto al castillo, encontrarás una estatua que homenajea al director.
Mirambel (Teruel)
A los pies del monte de San Cristóbal se encuentra este pueblo medieval amurallado. Su casco antiguo, declarado Bien de Interés Cultural, recibió en 1981 la medalla de oro de Europa Nostra. Entre sus visitas imprescindibles están la del Castillo de Mirambel y la Iglesia Parroquial de Santa Margarita. También merecen una visita el Convento de las Monjas Agustinas, la casa Consistorial y la casa de Aliaga. En noviembre se celebran las festividades del patrón de la villa con una romería a la ermita de San Martín y una misa.
Alquézar (Hueca)
Alquézar es otro precioso pueblo medieval. Pasear por sus calles y descubrir su arquitectura es un auténtico viaje al pasado. En su casco histórico, declarado conjunto histórico-artístico desde 1982, encontrarás la colegiata de Santa María, la ermita de Nuestra Señora de las Nieves y su preciosa plaza mayor. Los amantes del senderismo disfrutarán con la ruta de las Pasarelas, que recorre parte del cauce del río Vero.
Anento (Zaragoza)
Este pueblo zaragozano es uno de los más hermosos de nuestro país y un lugar ideal para pasar un par de días tranquilos disfrutando de la naturaleza. Situado en la comarca de Campo Romanos, Anento está rodeado por un paraje de montañas arcillosas que dan color a sus edificaciones. Perderte entre sus estrechas callejuelas o realizar alguna ruta de senderismo son de las mejores cosas que puedes hacer en tu visita.
Benasque (Huesca)
Conocido especialmente por esquiadores y amantes de los deportes de nieve, Benasque es un paraíso para los amantes de la montaña. Rodeado por los Pirineos, en invierno todo gira allí en torno a la nieve, pero cualquier época del año es perfecta para visitarlo. Este pueblo lleno de naturaleza alberga un casco urbano lleno de casitas de piedra. Paseando por sus calles encontrarás el palacio de los Condes de Ribagorza, la casa Juste o la iglesia de Santa María la Mayor.
Albarracín (Teruel)
Situado a las faldas de una montaña, Albarracín es como hacer un viaje a la Edad Media. Calles empinadas, escalinatas, pasadizos, casas de yeso rojo y su alta muralla, que se remonta al siglo XIV, dan forma a uno de los pueblos más ‘instagrameables’ de España. La localidad es Monumento Nacional desde 1961 y ha sido propuesta por la Unesco para ser declarada Patrimonio de la Humanidad.
Calaceite (Teruel)
En este municipio turolense lleno de casas señoriales, capillas, ermitas, plazas y pórticos no te dará tiempo a aburrirte. Fue reconocido como uno de los pueblos más bonitos de nuestro país y declarado Bien de Interés Cultural desde 1974. Entre sus principales atracciones destacan la Plaza España, la Iglesia Parroquial de la Asunción, el Museo de Juan Cabré o la Capilla de San Roque.
Aínsa (Huesca)
Situado en el alto Pirineo de Huesca, entre la confluencia de los ríos Ara y Cinca, su precioso casco está considerado conjunto histórico-artístico desde 1965. Caminando por sus calles podrás descubrir todos sus rincones y monumentos, como la plaza mayor y el castillo, en el que cada verano se celebra el Festival Internacional de Música Castillo de Aínsa, uno de los principales de Aragón.