Cómo las Birkenstock pasaron de ser un calzado ortopédico a uno de los artículos más deseados de la moda
La historia de la marca se remonta 250 años atrás

Un verano más, las Birkenstock vuelven a ser objeto de deseo. Estas sandalias, diseñadas para adaptarse a la forma natural del pie, lleva ya unos años de moda y nada indica que vayan a dejar de estarlo a corto plazo. Más bien al contrario: en el primer trimestre de este 2024, la compañía alemana facturó 481 millones de euros, un 23% más que en el mismo periodo del año anterior.
Aunque muchos no las conociéramos hasta hace relativamente poco, las Birkenstock tienen en realidad mucha historia a sus espaldas. Sus orígenes se remontan nada menos que 250 años atrás. Todo comenzó con el alemán Johann Adam Birkenstock, registrado como zapatero en el archivo eclesiástico de la ciudad Langen-Bergheim en 1774. Konrad, el bisnieto de Johann fue quien, en 1896, desarrolló la que acabaría convirtiéndose en el elemento diferenciador de la marca, una plantilla anatómica flexible, a la que llamaron footbed (cama para el pie). Todo un avance para la época, ya que por entonces los zapatos no se diseñaban precisamente para adaptarse al pie.
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La primera sandalia de Birkenstock fue el modelo Madrid, concebido como un calzado ortopédico y lanzado en 1963. Desde entonces la marca ha lanzado otros modelos como los zuecos Boston o las sandalias Gizeh, pero su gran éxito han sido las Arizona, esas sandalias destalonadas sujetas por dos tiras anchas ajustables mediante hebillas. Se lanzaron en 1973 y nadie por entonces imaginaba la popularidad que alcanzaría unas décadas después.
Allá por los noventa, un jovencísimo Marc Jacobs puso estas sandalias a las modelos del famoso desfile de primavera-verano de 1993 para Perry Ellis. Desde entonces han sido muchos los diseñadores y las celebrities que han caído rendidas ante las Birkenstock. Manolo Blanik, Jil Sander o Rick Owens son solo algunos de los que han lanzado colaboraciones especiales. Así, en un viaje similar al de Crocs, las Birkenstock han pasado de ser considerado un calzado ‘feo’ a un icono de estilo, manteniéndose fiel a su estilo cómodo, funcional y atemporal.
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El modelo Arizona apareció el año pasado en la película Barbie, aumentando más si cabe su popularidad. Frente a los tacones imposibles, estas sandalias representan al mundo ‘real’ en la cinta de Greta Gerwig, y es el calzado que elige la protagonista cuando se incorpora a él.
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La salida a Bolsa de Birkenstock se produjo en octubre de 2023, todavía en plena resaca del éxito de la película. En cualquier caso, L Catterton, la sociedad inversora de la familia Arnault (los accionistas mayoritarios de LVMH) sigue reteniendo la mayor parte del capital. El fondo adquirió en 2021 una participación mayoritaria en la empresa alemana en una operación valorada en 4.000 millones de euros.
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