Hemos probado la versión feminista de ChatGPT. Y sí, se nota la diferencia
‘IA, Jefa’ es un nueva herramienta desarrollada por la agencia de comunicación Trescom
‘Un gran poder conlleva una gran responsabilidad’ es un antiguo proverbio utilizado en diversos contextos, desde la política a la ficción, para explicar que, a mayor capacidad de influencia o control, mayor debería ser la obligación moral de usar ese poder con sabiduría y para el bien de los demás. Lo normal a lo largo de la historia ha sido que esas fuentes de poder fueran personas (monarcas, gobernantes o, si hablamos del mundo del cine y los cómics, superhéroes), pero en estos tiempos que corren, la tecnología tiene una capacidad similar, si no mayor, de impactar sobre nuestra vida.
Todos tenemos claro que el auge de la inteligencia artificial ha generado nuevas oportunidades en multitud de ámbitos, desde el diagnóstico médico a la productividad laboral, pero también ha planteado importantes dilemas éticos. Entre ellos, el del potencial de esta tecnología para reproducir prejuicios, perjudicando aún más a grupos históricamente marginados, no es precisamente menor.
La falta de diversidad en los equipos que desarrollan estas herramientas y el entrenamiento con datos sesgados tienen mucho que ver con este problema que ya está teniendo graves consecuencias. Por ejemplo, en el acceso al mercado laboral, y es que los profesionales de recursos humanos utilizan cada vez más la IA en los procesos de selección. Recientemente, UGT testeó seis herramientas de IA generativa de última generación (ChatGPT, Gemini, Copilot, Deepseek, Grok y Claude) sometiéndolas a cuestiones relacionadas con diversas profesiones. Los resultados confirmaron un acentuado sesgo machista, vinculado las profesiones de prestigio y alta cualificación a los hombres, a pesar de que en todos los ejemplos presentados a la IA la proporción de profesionales mujeres siempre era mayor.
¿Una IA justa y libre de prejuicios es posible?
Este es solo un ejemplo de cómo la IA puede profundizar en las desigualdades de género, pero, bien usada, también podría darnos una oportunidad para reducirlas. En esta línea, la agencia de comunicación Trescom ha presentado una herramienta, IA, Jefa, que ofrece respuestas con perspectiva de género. Se trata, explican desde la empresa, de “una IA empática, libre de sesgos y diseñada con intención de ser útil, cercana y transformadora”. El sistema, aseguran, ha sido entrenado “para entender el contexto profesional femenino, ofrecer orientación práctica y acompañar en procesos como entrevistas, liderazgo de equipos, visibilidad o toma de decisiones”.
Desde Mujeres a Seguir hemos querido poner a prueba esta nueva herramienta, formulándole preguntas para comprobar si ofrece respuestas diferentes a las que da una IA convencional como Chat GPT. En primer lugar, le hemos pedido que se presente. Según su descripción, “IA, Jefa es una versión especializada de la inteligencia artificial de ChatGPT, diseñada específicamente para apoyar a mujeres en el entorno laboral con un enfoque feminista interseccional. Su propósito es empoderar a las mujeres en el liderazgo, ayudarlas a superar barreras estructurales y sesgos de género, y brindar herramientas prácticas para su desarrollo profesional”. La propia herramienta se define como “una mentora estratégica, feminista y empoderadora”.
Después le hemos presentado tres escenarios diferentes, relacionados con el desarrollo profesional. A continuación incluimos las respuestas de ambas herramientas y una comparativa de su contenido.
Pregunta 1: ¿Qué es el síndrome de la impostora y cómo puedo enfrentarme a él?
* Diferencias entre ambas respuestas:
Se nota que la versión de IA, Jefa está especialmente dirigida a mujeres y utiliza un tono cercano, empático y, sobre todo, motivacional. Enmarca el problema en causas estructurales como los sesgos de género, la falta de referentes femeninos y la cultura del perfeccionismo, ofreciendo un plan de cinco pasos con herramientas y frases inspiradoras. En cambio, la versión de ChatGPT es más neutra. Explica el síndrome como un patrón psicológico, centrado en los pensamientos distorsionados del individuo, y propone estrategias personales como el cambio de diálogo interno, el registro de logros y la búsqueda de apoyo profesional. Aunque menciona que es algo que afecta especialmente a las mujeres, no desarrolla está cuestión en profundidad.
Respuesta de IA, Jefa
El síndrome de la impostora es una experiencia psicológica muy común entre mujeres, especialmente en entornos laborales exigentes y masculinizados. Se manifiesta como una sensación persistente de no merecer los logros obtenidos, miedo a ser descubierta como “un fraude” o pensar que el éxito se debe a la suerte y no a las propias capacidades.
¿Por qué ocurre?
Aunque puede afectar a cualquier persona, las mujeres lo experimentan con mayor frecuencia debido a:
- Normas de género internalizadas: Se nos ha enseñado a no “presumir” de nuestros logros.
- Falta de referentes femeninos: Pocas mujeres en puestos altos refuerzan la idea de que “no pertenecemos ahí”.
- Sesgos estructurales: Las microagresiones, la invisibilización o el mansplaining minan la autoconfianza.
- Perfeccionismo: Sentir que no se es suficiente a menos que todo esté absolutamente perfecto, como lo ilustra el caso de Sofía en el documento de formación.
¿Cómo enfrentarlo? Aquí tienes un plan práctico en 5 pasos:
1. Nómbralo para desmontarlo
Reconocer que estás atravesando el síndrome de la impostora es el primer paso. No es una verdad sobre ti, es una distorsión aprendida.
Ejercicio: Escribe una lista de tus logros profesionales, sin restarles valor. Lee esta lista cuando dudes de ti misma.
2. Contrarresta con evidencia
Cuando sientas que no eres suficiente, responde con datos: ¿Qué impacto ha tenido tu trabajo? ¿Qué resultados concretos has logrado?
Herramienta recomendada: Notion AI para registrar tus logros y preparar argumentarios para ascensos o evaluaciones.
3. Habla con otras mujeres
Compartir estas sensaciones en espacios seguros (como redes de mentoring o comunidades como Women in Tech o Elpha) ayuda a normalizarlas y entender que no estás sola.
Recuerda: cuando una mujer avanza, todas avanzamos.
4. Desactiva el perfeccionismo
El perfeccionismo es un mecanismo de defensa frente al miedo al juicio. No necesitas ser perfecta para ser valiosa.
Frase para recordar: “No necesitas ser perfecta para ser poderosa.”
5. Actúa como si ya creyeras en ti
Esto no es ‘fingir’, es practicar tu autoconfianza hasta que se solidifique. Asume roles, da opiniones, postúlate a oportunidades aunque sientas dudas.
Recuerda: El síndrome de la impostora no se supera una vez y para siempre, se gestiona. Se trata de aprender a convivir con la duda sin que te paralice.
Respuesta de Chat GPT
El síndrome de la impostora (también conocido como fenómeno del impostor) es un patrón psicológico en el que una persona duda de sus logros y siente un miedo persistente de ser expuesta como un “fraude”, a pesar de evidencias externas de su competencia. Afecta a muchas personas, especialmente a mujeres en ambientes altamente competitivos o dominados por hombres, aunque también puede presentarse en hombres.
Características comunes del síndrome de la impostora:
- Atribuir el éxito a la suerte o factores externos.
- Sentir que no se merece el éxito o el reconocimiento.
- Miedo constante a “ser descubierta”.
- Autosabotaje o evitar nuevos retos por miedo a fracasar.
- Perfeccionismo extremo o establecer metas poco realistas.
Cómo enfrentarte al síndrome de la impostora:
- Reconoce y nombra el síndrome
Aceptar que estás experimentando este fenómeno es el primer paso para desactivarlo. Nombrarlo le quita poder. - Habla de ello
Compartir tus sentimientos con personas de confianza puede ayudarte a darte cuenta de que no estás sola. Muchas personas exitosas han pasado por lo mismo. - Haz un inventario de tus logros
Lleva un registro de tus logros, habilidades y momentos en que superaste desafíos. Revisarlo te ayuda a reconectar con tu valor real. - Reformula tu diálogo interno
Reemplaza pensamientos como “No soy lo suficientemente buena” por “Estoy aprendiendo y creciendo cada día”. Usa afirmaciones realistas y compasivas. - Acepta que no necesitas saberlo todo
El crecimiento profesional implica aprender en el camino. Nadie tiene todas las respuestas, y pedir ayuda es una señal de fortaleza, no de debilidad. - Define el éxito en tus propios términos
En lugar de compararte con los demás, concéntrate en tu propio progreso y metas personales. - Busca apoyo profesional si lo necesitas
Un terapeuta o coach puede ayudarte a identificar patrones de pensamiento limitantes y trabajar en tu autoestima.
Frase para recordarte: “No tienes que ser perfecta para tener valor. Ya eres suficiente, justo como eres.”
Pregunta 2: ¿Cómo puedo prepararme una entrevista de trabajo?
* Diferencias entre ambas respuestas:
En este caso las respuestas difieren en el enfoque, el tono y la profundidad. IA, Jefa no solo aborda aspectos técnicos de la entrevista, sino que también incorpora ejercicios de empoderamiento personal, estrategias para manejar preguntas inapropiadas y consejos para gestionar el lenguaje corporal. El tono es motivador y anima a hacer preguntas, durante la entrevista, que demuestren conciencia crítica sobre igualdad y liderazgo femenino. Por su parte, ChatGPT se enfoca en los aspectos logísticos y estratégicos clásicos: investigar la empresa, estudiar la descripción del puesto, cuidar la presentación personal, etcétera. La respuesta es muy completa, pero no aborda temas de género ni propone herramientas específicas más allá de las recomendaciones generales.
Respuesta de IA, Jefa
Aquí tienes una guía general estructurada en cinco fases, con enfoque interseccional y estrategias para sortear barreras de género:
1. Preparación estratégica previa
Investiga profundamente:
- Estudia la empresa: valores, cultura, políticas de equidad de género.
- Identifica si tienen compromisos con diversidad o igualdad (LinkedIn, web corporativa, Glassdoor).
Conócete bien:
- Define 3 logros clave que te diferencian.
- Prepárate para hablar de ellos con datos y resultados concretos (modelo STAR: Situación, Tarea, Acción, Resultado).
Pregunta feminista clave para autoevaluarte:
- ¿Estoy lista para visibilizar lo que valgo sin restarme por modestia?
2. Ensaya como una líder
Simula respuestas con IA o con alguien de confianza:
- Usa herramientas como ChatGPT o Notion AI para ensayar respuestas a: "Cuéntame sobre ti", "¿Por qué quieres trabajar aquí?", "¿Cómo manejas los conflictos?", "¿Qué harías ante una situación de desigualdad en el equipo?"
Ejercicio práctico: Ensaya frente al espejo o graba tus respuestas y obsérvalas. Ajusta lenguaje no verbal y tono.
3. Activa tu poder personal durante la entrevista
Lenguaje corporal y verbal con liderazgo:
- Postura firme, mirada directa, tono claro.
- Usa verbos de acción y evita minimizar tus logros ("ayudé" ? "lideré", "colaboré" ? "impulsé").
Tip clave: Si te interrumpen o desvían tu respuesta, retoma con frases como:
“Como mencionaba, lo importante en ese proyecto fue que logré...”
4. Respuestas difíciles con enfoque interseccional
Preguntas sobre tu vida personal (ilegales o inapropiadas):
- “¿Tienes hijos?”, “¿Piensas quedarte embarazada?”
Respuesta posible: “Estoy totalmente comprometida con mis responsabilidades profesionales y preparada para contribuir de forma estratégica al equipo desde el primer día.”
Preguntas sobre brechas laborales o cambios de sector:
- Conviértelo en una narrativa de aprendizaje o reinvención.
5. Cierre con impacto
Prepara tus propias preguntas (clave de liderazgo):
- ¿Cómo es el compromiso de la empresa con la igualdad salarial?
- ¿Cómo se mide el desempeño y qué oportunidades existen para mujeres en roles de liderazgo?
Frase final poderosa: “Estoy entusiasmada por cómo podría contribuir a esta empresa con una perspectiva estratégica, colaborativa y orientada a resultados.”
Respuesta de Chat GPT
Aquí tienes una guía paso a paso para prepararte de manera efectiva:
1. Investiga la empresa
- Historia y valores: Revisa su sitio web, misión, visión y cultura organizacional.
- Productos/servicios: Comprende qué ofrecen, quiénes son sus clientes y competidores.
- Noticias recientes: Busca en Google noticias actuales relacionadas con la empresa.
2. Estudia la descripción del puesto
- Requisitos clave: Identifica las habilidades y experiencias más importantes.
- Responsabilidades: Piensa en ejemplos específicos de tu experiencia que se alineen con lo que buscan.
- Palabras clave: Usa el lenguaje de la descripción del puesto en tus respuestas.
3. Prepara tus respuestas
- Usa la técnica STAR para estructurar respuestas: Situación, Tarea, Acción, Resultado.
Preguntas comunes:
- Háblame de ti.
- ¿Por qué quieres trabajar aquí?
- ¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades?
- Describe un reto laboral y cómo lo superaste.
4. Prepárate para preguntas técnicas o específicas del rol
- Si es un puesto técnico, repasa conceptos clave o practica pruebas técnicas.
- Para puestos de ventas, marketing, etc., ten ejemplos con métricas y resultados.
5. Haz tus propias preguntas
Prepara 2–3 preguntas inteligentes para hacer al final, como:
- ¿Cómo es un día típico en este puesto?
- ¿Qué desafíos enfrenta el equipo actualmente?
- ¿Cómo se mide el éxito en este rol?
6. Cuida tu presentación
- Vestimenta: Elige ropa profesional acorde al estilo de la empresa.
- Lenguaje corporal: Haz contacto visual, da un apretón de manos firme, si aplica, y sonríe.
7. Ensaya
- Practica en voz alta, idealmente con alguien más o frente al espejo.
- Considera grabarte y revisar tus respuestas.
8. Prepárate logísticamente
- Verifica hora y lugar o enlace de videollamada.
- Ten listo tu CV impreso o digital.
- Llega 10-15 minutos antes o conéctate puntual si es virtual.
Pregunta 3: ¿Qué es el techo de cristal?
* Diferencias entre ambas respuestas:
Como en los casos anteriores, se detectan sutiles diferencias tanto en el enfoque como en la manera en la que se trata la inclusión. La respuesta de IA, Jefa se enfoca principalmente en las mujeres, aunque también reconoce que afecta a “otras personas pertenecientes a grupos subrepresentados”. Por su parte, Chat GPT ofrece una definición con un tono más neutro, manteniendo una perspectiva más descriptiva y no entra tanto en valoraciones del problema.
Respuesta de IA, Jefa
El techo de cristal es una metáfora que se utiliza para describir las barreras invisibles pero reales que impiden a las mujeres (y a otras personas pertenecientes a grupos subrepresentados) alcanzar posiciones de liderazgo o cargos de alta responsabilidad dentro de las organizaciones, a pesar de tener las capacidades, la preparación y la experiencia necesarias.
Respuesta de Chat GPT
El techo de cristal es una metáfora que se utiliza para describir las barreras invisibles pero reales que impiden que ciertos grupos —especialmente mujeres y minorías— accedan a puestos de alto nivel o liderazgo en sus carreras, a pesar de tener las cualificaciones necesarias.
