La emprendedora que enseña a los niños a programar jugando
Esther Elías es la fundadora y CEO de FunTech Rocket

Como el inglés para generaciones anteriores, Esther Elías está convencida de que la programación será la habilidad que marque la diferencia en el mercado laboral del futuro. Elías es cofundadora y CEO de FunTech Rocket, una plataforma online de formación gamificada que enseña programación y código a niños y niñas de entre 6 y 14 años. La plataforma va guiando el aprendizaje del niño, que es gradual, mediante tutoriales y ejemplos prácticos. “Con nuestra plataforma, el niño pasará de no saber nada a programar aplicaciones utilizando código real”.
Antes de poner en marcha FunTech Rocket, Elías, psicóloga de formación, trabajó en una consultora de recursos humanos. Allí fue donde tomó conciencia de la gran demanda de programadores e ingenieros que hay en la actualidad. “Hace nada leía un artículo que decía que a día de hoy se están buscando unos 500.000 perfiles de programación y competencias digitales y que la pandemia era la causa principal de ese aumento de la demanda. Si estas son las cifras ahora, no me quiero imaginar la que se avecina. Es por ello que es importante concienciarse y prepararnos para el futuro. Tanto si se quiere ser programador como si no, los conocimientos de programación y tecnología serán necesarios en todas las profesiones, y las personas que cuenten con estos conocimientos serán las que tengan acceso a las mejores vacantes en el futuro”.
El equipo de FunTech Rocket está formado por programadores, pedagogos y psicólogos que trabajan con un objetivo: lograr que los niños se diviertan a la vez que aprenden. El acceso está recomendado para pequeños a partir de 6 años, una edad, a la que, según su fundadora, es posible aprender a programar. “¡Se puede y se debe! Aunque nos suene como algo muy difícil, aprender programación es como aprender cualquier idioma. Los expertos coinciden, cuanto antes aprendan, mejor. La plasticidad cerebral de los niños es brutal, por lo que es importante aprovechar esa ventaja y que así aprendan habilidades que influirán muy positivamente en su futuro”. Elías se refiere a habilidades como la capacidad de resolución de problemas, de razonamiento lógico, pensamiento estructurado y crítico, etcétera.
Según la creadora de FunTech Rocket, bastan quince minutos al día (eso sí, con constancia) para que un niño aprenda a programar, aunque el acceso a la plataforma es libre y se adapta a la rutina y necesidades de cada familia.
En la plataforma también son conscientes de la importante brecha de género que existen en profesiones STEM y colaboran con distintas organizaciones e iniciativas que trabajan para cerrarla como Talent Girl o Inspiring Girls, con la que recientemente lanzaron un concurso que ofrecía diez suscripciones anuales gratuitas a la plataforma.