“Hemos sido menos, pero siempre hemos estado”
Vanessa de Velasco es la creadora de Aviadoras, una plataforma que trabaja para hacer crecer la exigua cifra de mujeres piloto (y lo está consiguiendo)


El premio especial MAS Comunidad de Madrid, un galardón que se entrega dentro de los Premios Mujeres a Seguir y que reconoce a un movimiento que trabaje por el progreso de la mujer en algún ámbito profesional, ha sido este año para Aviadoras, una plataforma de profesionales del sector de la aviación que busca aumentar el exiguo porcentaje de mujeres piloto. Vanessa de Velasco es su fundadora.
En 1969, Bettina Kadner se convirtió en la primera piloto de aviones comerciales en España. Fue la única mujer en cabina durante una década. Llegó a comandante en 1998 cuando trabajaba para Iberia (antes volaba con la desparecida Spantax) y se jubiló en 2006. Ya ha pasado casi medio siglo desde que Kadner abriera la puerta de la aviación civil a las mujeres, pero, lamentablemente, no demasiadas han seguido su estela. Es lo que averiguó Vanessa de Velasco durante su investigación para el trabajo final del grado de piloto de líneas aéreas que estaba haciendo. Velasco decidió estudiar el papel de la mujer en la historia de la aviación y su presencia hoy en escuelas y compañías. Se encontró con una realidad bastante decepcionante: de los 6.000 afiliados al SEPLA, apenas 200 eran mujeres; es decir, solo el 3% “No me sorprendió”, reconoce. “Lo que sí me sorprendió es que nadie antes se hubiera tomado realmente en serio la necesidad de buscar este tipo de datos. En España no había información sobre el número y el tipo de licencias disgregadas por género, que es algo que sí hay en otros países como Estados Unidos. No tendría importancia si las cifras fueran parecidas, pero al haber tantísima diferencia es esencial que la administración se ponga manos a la obra para saber cuál es la verdadera situación”.
Decidida a hacer algo para mejorar ese exiguo 3%, De Velasco contactó con el presidente de la Asociación Española de Pilotos y, con su apoyo, se lanzó a crear la plataforma Aviadoras. Tras meses de trabajo, la iniciativa se presentó oficialmente en octubre de 2017 con un evento en el aeropuerto de Cuatro Vientos que incluyó debates, actuaciones, cóctel, zona infantil, y cómo no, una exhibición aérea a cargo de la Fundación Infante de Orleans.
El objetivo de Aviadoras es dar voz a las pilotos, crear comunidad y fomentar la igualdad en el sector promoviendo medidas de conciliación reales. La plataforma pretende también dar visibilidad a los referentes femeninos del mundo de la aviación. La falta de visibilidad es, a juicio de su fundadora, el principal motivo de la escasez de mujeres piloto. “Si no ves algo, no sabes que existe y no te planteas la posibilidad de serlo tú también. Es básico que las compañías y la administración se preocupen por visibilizar las profesiones del sector aeroespacial y a las mujeres piloto en particular. Hace tres años prácticamente no había imágenes de mujeres piloto en la publicidad de las compañías. Ahora algunas muestran siempre a pilotos de ambos géneros. La visibilidad normaliza la presencia que la mujer siempre ha tenido en la aviación. Hemos sido menos, pero siempre hemos estado”. Desde Aviadoras trabajan también para recuperar el papel de esas pioneras que les abrieron camino, mujeres con la citada Bettina Kadner, Dolors Vives, Pepa Colomer o María Berlaldo de Quirós, la primera en conseguir, en 1928, una licencia de vuelo en España. “Hay varios historiadores que nos han ayudado y han hecho presentaciones para nosotros. Yo no soy una experta en el tema, estoy empezando a conocer a mis mayores en esta etapa, antes no había pensado en ello, aunque sí puedo recomendar algunos libros, como Damas del aire, de Jorge García, o Ellas conquistaron el cielo, de Bernard Marck”.
Pero no se trata solo de poner en valor el pasado, sino, sobre todo, de despertar futuras vocaciones. En su caso, le venía de familia: su padre y su hermano también son pilotos. Pero la mayoría de los niños no tienen un contacto tan directo con este sector. “La profesión de piloto requiere capacidades como el estudio intenso, la conciencia situacional, la capacidad comunicación y de liderazgo, entre otras. Niños y niñas tienen que saber que las tienen. Los niños tienen muchos más referentes masculinos y los han normalizado, para ellos no es raro realizar un trabajo en el que siempre se han visto representados. Por eso es tan importante que las mujeres pilotos den charlas, para que las niñas piensen: si ella ha podido, yo también”. Vanessa de Velasco considera igualmente importante el cambio que se está produciendo a nivel cultural. “Películas como The right staff o Top gun demuestran que los referentes hasta hace muy poco solo eran masculinos. Ahora hay más mujeres piloto en pantalla y se están haciendo series documentales sobre mujeres como las Mercury 13 las trece pilotos preparadas por la Nasa en los setenta para ser astronautas, aunque finalmente el programa se suspendió y no pudieron ir al espacio. El siguiente paso será la normalización, cuando ya no nos sorprenda ver a la protagonista de una película a los mandos de un avión”.
En la gestión de Aviadoras, Vanessa de Velasco cuenta con la ayuda de voluntarios, tanto pilotos en activo como personal del SEPLA. “Gracias a ellos, chicos y chicas que nos ayudan día tras día, en poco tiempo existirá un estructura sólida y global que hasta ahora no teníamos y que ni nos planteábamos”. En su opinión, esto puede marcar un punto de inflexión y ayudar a conseguir que las mujeres se planteen de verdad una profesión que a ella le apasiona. “Me encanta el vuelo en sí, llevar el avión, conocer los procedimientos y el lenguaje. Y aunque es cansado y a veces puede resultar una vida más desarraigada que otras, conocer a la gente que trabaja contigo dentro y fuera del avión, la responsabilidad y la obligación de mantener una formación continua, me animan y me recuerdan que debo que ser mejor profesional cada día”.
Esta entrevista se publicó primero en la última edición de nuestra revista en papel.