¿Cómo recuerdas de tu primer día de trabajo? Había trabajado antes en otros lugares, pero mi primer día de trabajo ‘profesional’ estaba muy nerviosa. Pensaba que no iba a saber hacer nada y que me iban a descubrir. Se me hizo muy largo. Pero también recuerdo compañeros que me acogieron muy bien y me lo pusieron muy fácil y una sensación muy agradable al pensar que estaba donde quería estar.

¿Quién es la persona que más ha influido en tu carrera? Me resulta muy difícil nombrar a una sola persona. He tenido jefes maravillosos de los que he aprendido mucho y me han dado grandes oportunidades y también otros que han sido un fantástico ejemplo de lo que no quiero ser, lo que, en realidad, me ha sido tremendamente útil. También compañeros y compañeras profesionales o académicos que han sido inspiración, apoyo o ayuda en momentos determinantes. Y, por supuesto, colegas y referentes a los que admiro. No puedo olvidarme tampoco de colaboradores que han hecho posibles los proyectos y éxitos en los que he tenido la suerte de participar. Para mí, la carrera profesional es un camino que se recorre siempre en compañía; soy jugadora de equipo.

Descríbete con tres adjetivos. Perseverante, exigente, divertida.

¿Qué talento te habría gustado tener? Conocimiento infinito y bailar. Bailar como Penny en Dirty dancing.

¿Cuál es el mejor cumplido que te han hecho? Hace unos años, un muy buen amigo me regaló un cumplido maravilloso: “Contigo siempre pasan cosas, haces que pasen cosas, así que siempre apetece pasar tiempo contigo”.

Elige una mujer cuya carrera te haya inspirado. Coco Chanel. Creo que fue una mujer muy innovadora, pionera en muchos aspectos, con una personalidad muy marcada y valiente. No comparto muchas de sus ideas, pero, sin duda, me parece un personaje interesantísimo. Fue capaz de construir la narrativa estética de toda una época partiendo de sus propios gustos y saliéndose completamente de lo establecido.

¿Cuál ha sido tu mayor reto profesional hasta la fecha? Implantar una marca española en otro país, en Italia, fue un reto súper interesante y del que aprendí mucho.

Si pudieras elegir a cualquier persona, ¿con quién te gustaría trabajar? Con Ana Patricia Botín. Creo que es una mujer brillante, con una capacidad de influencia y liderazgo envidiables.

¿Qué te hace reír? Creo que tengo buen sentido del humor y puedo encontrar la parte cómica a casi cualquier situación. Me rio mucho, cuando no es así, hay algo que no está bien.

¿Y lo que más te enfada? Me enfadan mucho la falta de honestidad, la desconsideración y la injusticia.

Si volvieras atrás, ¿harías algo de forma diferente?

Sería menos exigente conmigo misma, más paciente; haría deporte desde la infancia e intentaría eso que algunas personas dicen que consiguen de educar al paladar para que no les guste el dulce.

¿Cuál es tu bien más preciado? Es algo contradictorio porque me gustan las cosas bonitas y soy más consumista de lo que me gustaría, pero no tengo nada material sin lo que no pueda vivir. Las cosas son solo eso, cosas. Lo más preciado para mí, al margen de mis hijas, son las personas que me acompañan en la vida, tengo mucha suerte en eso.

¿En qué ciudad te gustaría vivir? En Roma, aunque no para siempre. Y en Ibiza por temporadas.

Si eligieses una profesión diferente, ¿cuál sería?  Arquitecta. Tiene una mezcla de ciencia y creatividad, de arte, que me parece fascinante.

¿Qué experiencia que todavía no hayas vivido te gustaría vivir? Trabajar en otro país. Es algo que todavía tengo en mi lista de pendientes y que creo que es posible.

¿Qué haces para desconectar del trabajo? Correr, viajar, cocinar y pasar tiempo con amigos.

Recomiéndanos un libro, un disco, una serie y una película. Una película, As bestas, estoy maravillada con ella, no hay nada que no me guste, desde los actores, la fotografía, el ritmo… Una serie, Friends, es un tópico, pero es una serie que marcó una época y que aun hoy sigue siendo actual. Hace tiempo que como la mayoría de la gente consumo más canciones que discos, pero Física y química, de Sabina, es un disco que habré escuchado un millón de veces y Primitive love, de Miami Sound Machine o cualquier cosa que cante Gloria Estefan, siempre me pone a bailar. Cien años de soledad es un libro que creo que todo el mundo debería leer.

¿Dónde te ves dentro de diez años? Hace algún tiempo hubiera tenido clara esta respuesta. Hoy no lo sé y está bien así. Espero verme haciendo algo que me divierta, que tenga que ver con personas y que esté alineado con mis valores.