La NASA busca candidatas para cobrar 16.500 euros por pasar dos meses en la cama
Si tienes entre 24 y 55 años, buena salud y no eres fumadora, enhorabuena, puedes participar

La NASA, la Agencia Espacial Europea y el Centro Aeroespacial Alemán están llevando a cabo un estudio para probar los efectos de la ingravidez en los cuerpos de los astronautas. El objetivo es buscar métodos para prevenir la atrofia muscular y ósea que sufren cuando pasan largos períodos en el espacio. La falta de gravedad sería comparable con pasarse todo el día en la cama. Por ello buscan voluntarios dispuestos a pasar sesenta días en una. A cambio recibirán 19.000 dólares (unos 16.500 euros).
La primera fase ya está en marcha. Desde marzo doce hombres están haciendo la prueba. Ahora las agencias buscan a la docena de mujeres que participarán en la segunda fase, que comenzará en septiembre.
La oferta parece, sin duda, tentadora, pero no todo el mundo puede optar a ella. Las candidatas deben tener entre 24 y 55 años, gozar de buena salud y no fumar. Además, deben medir entre 153 y 190 centímetros y tener un índice de masa corporal de entre 19 y 30 kg/m2. Otro de los requisitos es que hablen alemán, pues las pruebas se realizan en las instalaciones del Centro Aeroespacial Alemán en Colonia.
Una vez elegidas tendrán que pasar dos meses sin levantarse de la cama para nada. Los experimentos, comidas y actividades de ocio se llevarán a cabo acostadas, explican en un comunicado. Podrán ver series, leer, estudiar e incluso recibir visitas de familiares y amigos, pero siempre tumbadas.

Las camas estarán inclinadas seis grados para recrear el desplazamiento de los fluidos corporales que experimentarán los astronautas en el espacio. Al parecer, la ingravidez hace que se produzca una redistribución de los líquidos corporales que son atraídos hacia la cabeza de los astronautas. Para contrarrestar este efecto, las participantes deberán pasar 30 minutos al día en una cama centrífuga, que simula la gravedad artificial.
Además de esos sesenta días que hay que pasar en posición oriental, habrá cinco días de orientación y catorce de descanso y rehabilitación al principio y final del estudio, lo que supone un total de 89 días. Posteriormente las participantes pasarán cuatro consultas de seguimiento: a los catorce días, a los tres meses, al año y a los dos años. En todo momento las voluntarias permanecerán monitoreadas: medirán su presión arterial, frecuencia cardíaca, absorción de nutrientes, gasto de energía, masa ósea e incluso su estado de ánimo.
No es la primera vez que se realiza un experimento de este tipo. Desde hace décadas las agencias espaciales de todo el mundo hacen pruebas parecidas. La más extrema fue quizá la que realizaron en Rusia en 1986 once hombres que pasaron un año entero en la cama.
