¿Qué copa menstrual elegir? Te damos las claves para acertar con la tuya
Aunque sirven para lo mismo, no todas son iguales
A estas alturas, seguro que ya conoces las ventajas que la copa menstrual ofrece frente a otros productos de higiene femenina. Es reutilizable, por lo que es más respetuosa con el medio ambiente. Además, a largo plazo sale más barata, ya que su vida útil ronda los diez años. Y está fabricada con materiales que no producen alergias ni se han asociado a casos de síndrome del shock tóxico.
Pero ¿qué copa menstrual se adapta a mí? Esta es la pregunta que muchas mujeres se hacen al decidirse a probarla. Y es que la oferta es cada vez más amplia. Las hay de varios tamaños y formas, más o menos rígidas y hasta con aplicador.
Las copas tienen talla, por eso, antes de lanzarte a comprar una, es importante que conozcas tu cuerpo y la altura de tu cérvix y también tienes que tener presente cómo de abundante es tu flujo menstrual. Cada marca suele tener una guía para que puedas ver qué talla se ajusta a ti.
En cuanto a la forma, aunque siguen un mismo patrón, puedes encontrar pequeñas diferencias. Como, por ejemplo, la forma de la base o tirador: puede acabar con un palito, un cordón más largo como el de los tampones, una bolita o en forma de anillo. Algunas de estas terminaciones están pensadas para que puedas tirar de ellas y retirar la copa con más facilidad, y otras son solo una guía para alcanzar la base.
También influye la dureza de la copa, las hay más firmes o blandas. Las más rígidas están indicadas para mujeres que realizan mucho deporte y no tienen un suelo pélvico debilitado. Y las más blandas son una buena opción para mujeres con incontinencia urinaria o endometriosis, ya que son más delicadas. Eso sí, puede que no sean las más indicadas para principiantes, ya que requieren más maña a la hora de ponerlas. La buena noticia es que hay copas de firmeza y flexibilidad intermedia que pueden ser un buen punto de partida.
Cada marca, además, tiene algunos modelos con ciertas particularidades que las diferencian de otras copas y pueden ayudar a que te decantes por una u otra:
Fabricada con silicona líquida de grado médico (es decir, examinado y aprobada para garantizar que puede permanecer dentro del cuerpo humano durante largos períodos de tiempo sin riesgos), Enna Cycle está indicada para mujeres con la zona íntima sensible. Aun así, su firmeza es media, lo que la hace manejable. Existen tres tallas y viene con un aplicador que puede hacer más fácil su colocación. Además, incluye una práctica caja esterilizadora, que facilita su limpieza al permitir hacer la esterilización en el microondas.
Este modelo de Intimina es plegable, lo que la hace ideal para llevarla encima y tenerla siempre a mano. Está disponible en dos tallas y es bastante flexible. El único inconveniente es su capacidad, que hace que solo pueda llevarse durante un máximo de ocho horas seguidas, en vez de las doce horas que indican otros modelos.
Como su propio nombre indica, MeLuna soft es muy suave. Según la marca, es un 25% más elástica y blanda que sus modelos clásicos. Está disponible en cuatro tallas, varios colores y con tres diferentes terminaciones (palito, bola y anillo). Este modelo está indicado para mujeres con la musculatura de la pelvis poco desarrollada y cuya zona íntima sea más sensible y/o propensa a infecciones.
Esta copa va un paso más allá en cuanto a innovación se refiere: no tienes que quitártela para vaciarla. Cuenta con un sistema de vaciado con una cánula larga. Esta cánula se dobla hacía arriba para cerrar el paso de la sangre y se estira para dejarla salir. La puedes encontrar en tres tamaños y hay packs que incluyen un esterilizador plegable.
Más que una copa es un disco menstrual, con el que se pueden mantener relaciones sexuales sin necesidad de retirarlo. Se coloca de manera diferente a las copas menstruales clásicas, y no es tan fácil de retirar, por lo que está indicada para mujeres con cierta experiencia previa. Está disponible en dos tallas.