Casi la mitad de los españoles creen que el alcohol causa las violaciones
El 20% considera que las violaciones dentro de la pareja no deben ser castigadas por la ley, según un informe del Gobierno

La mayoría de la población española rechaza culpar a la víctima de una agresión sexual que ha bebido, pero casi la mitad exime parcialmente de culpa al agresor si este había consumido alcohol. Es una de las conclusiones más sorprendentes, aunque hay más, del primer informe sobre Percepción Social de la Violencia Sexual, realizado por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género a partir de casi 2.500 entrevistas a mayores de 16 años. En concreto, el 83,3% de los encuestados rechaza que “si una mujer es agredida sexualmente estando borracha tiene parte de culpa por haber perdido el control”, pero el 47% cree también que “el alcohol es a menudo el causante de que un hombre viole a una mujer”. El informe lamenta que un 50% de la población tenga una opinión que implica eximir de culpa al agresor”, lo que demuestra la necesidad de “continuar educando y sensibilizando a la ciudadanía”.
También sigue persistiendo el mito de que es más probable que una mujer sea violada por un desconocido que por un conocido. Así lo creen el 43,6% de los hombres y el 37,3% de las mujeres, cuando los datos oficiales indican que solo el 18,6% de las violaciones que se producen fuera de la pareja son cometidas por desconocidos.
Un porcentaje significativo de la población española (19,3%) opina también que obligar a la pareja a mantener relaciones sexuales no deseadas es “inaceptable, pero no siempre debe ser castigado por la ley”. También hay cierta tolerancia respecto a comportamientos como tocar a una mujer de forma no deseada, besar a una mujer contra su voluntad o hacer comentarios y sugerencias de tipo sexual no deseados a una mujer. De hecho, esto último es “aceptable” para el 10% de los españoles. El 32,5% opina que “si una mujer invita a un hombre a tomar una copa en su casa después de haber salido por la noche significa que quiere sexo”.
También siguen presentes ideas como que “cualquier mujer que sea tan poco precavida como para andar sola de noche por callejones oscuros tiene parte de culpa si es violada” (lo dice el 13,7%), que “una mujer se vista de forma provocativa no debería sorprenderse si un hombre intenta obligarle a mantener relaciones sexuales” (17,6%), que “una mujer que haya tenido muchas parejas sexuales tiene menos credibilidad si denuncia una agresión sexual” (22,4%) y que "si una mujer no tiene intención de tener relaciones sexuales con un hombre no debería coquetear con él" (43,7%).
Además, el 34,1% de los hombres y el 22,5% de las mujeres creen que “muchas mujeres tienden a exagerar el problema de la violencia machista”.
Las respuestas más frecuentes cuando se preguntó por los motivos por los que algunos hombres agreden sexualmente a las mujeres fueron que tienen problemas mentales (34,1%), que no aceptan el rechazo (28,2%) y el consumo de alcohol y drogas (25%).
En cuanto a la prostitución, la gran mayoría (97%) rechaza obligar a las mujeres a prostituirse, pero el consumo de prostitución es considerado como algo aceptable por el 42,9% de los hombres y el 30,9% de las mujeres.
El 93,6 % de las personas entrevistadas consideran que es necesario educar en el consentimiento sexual para prevenir agresiones sexuales. El 77% cree que hay que es más importante educar a los hombres a los hombres para no agredir, frente al 14,8% que habría que centrarse en enseñar a las mujeres a evitar situaciones de riesgo.