El arte protesta contra los que protestan atacando sus grandes obras
Una campaña pide que no se dañe el patrimonio de la humanidad para concienciar sobre los efectos del cambio climático
La Mona Lisa de Leonardo da Vinci, Los girasoles de Van Gogh, La joven de la perla de Johaness Vermeer, Las Majas de Goya, La primavera de Boticelli, Masacare en Corea de Picasso o Latas de sopa Campbell de Andy Warhol son algunas de las grandes obras que en los últimos meses han sido atacadas por grupos activistas para llamar la atención de los medios y concienciar a la sociedad sobre los efectos negativos del cambio climático.
Una estrategia sin duda efectiva, pero también muy polémica. Con motivo del Día Mundial del Arte, que se celebra mañana, el colectivo The Art Defenders ha puesto en marcha una acción, en colaboración con la agencia TuMadre, que busca poner freno a este tipo de protestas.
Según el colectivo, la defensa del arte y la lucha contra el cambio climático son compatibles y la opinión pública debería centrar su atención sobre los verdaderos responsables de la crisis climática. Por ello han ‘enmarcado’ lugares como el Congreso, el Ministerio de Medio Ambiente y algunas de las principales empresas petroleras y energéticas del país, sitios que, a su juicio, deberían ser escenario de la reivindicación.
Además, han creado un filtro de Instagram que simula el marco junto con la frase “La culpa no es del arte, es de ellos”, para que cualquiera pueda unirse al movimiento fotografiando los lugares donde se toman las decisiones que afectan el futuro de nuestro planeta. En la web de la campaña también se incluye un mapa para localizar puntos en los que protestar en todo el mundo, así como el manifiesto creado por el colectivo.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de The Art Defenders (@theartdefenders)