De ‘Vértigo’ a ‘Pulp Fiction’, los carteles más icónicos de la historia cine
Crear un buen poster es tan difícil como firmar un buen guion o hacer una buena interpretación
Con los carteles de películas pasa como con las portadas de discos: la mayoría pasan sin pena ni gloria, pero unos pocos logran trascender y acaban entrando a formar parte del imaginario colectivo. Recordamos los que consiguen condensar el espíritu de una película en una imagen tan potente que se graba a fuego en nuestra memoria. Y algunos son, además, obras maestras del diseño gráfico.
‘Tiburón’
Paul Bacon y Roger Kastel son los ilustradores detrás del genial poster de uno de los primeros filmes de Steven Spielberg. En él aparece una mujer nadando por la superficie del agua mientras un enorme tiburón se aproxima dispuesto a hincarle el diente. Al parecer, Bacon creó la imagen original para el libro en el que se basaba la película, publicado por Peter Benchley en 1974. Pero el diseño del tiburón no acababa de convencer al equipo, así que pidieron a Kastel que lo mejorara. El resultado es el que todos conocemos.
‘Desayuno con diamantes’
El artífice del cartel de la aclamada película de Blake Edwards es Robert McGinnis, un prolífico ilustrador que transformó la cartelería del cine. Es especialmente recordado por sus ilustraciones para James Bond, pero también por su primer trabajo para el mundo del cine: la imagen que creó para Desayuno con diamantes.
‘La guerra de las galaxias’
Mostrar el enfrentamiento del bien contra el mal. Ese fue el desafiante briefing que recibió Tom Jung, elegido para crear el cartel de la primera entrega de Star Wars: una nueva esperanza. Su solución fue un poster con Luke y Leia en primer término, y Darth Vader y la Estrella de la muerte al fondo. El cartel se usó durante un tiempo, aunque nunca llegó a convencer del todo a George Lucas ni a los ejecutivos del estudio. El director pidió primero a otros ilustradores, los hermanos Hildebrandt, que hicieran un retoque más tipo cómic, pero cuando la película se convirtió en un éxito, decidieron encargar directamente a Tom Chantrell una nueva imagen que acabó siendo el cartel oficial.
‘Alien’
Con muy pocos elementos, el poster de Alien, el octavo pasajero consiguió llamar mucho la atención. El diseño, firmado por Frankfurt Gips Balkind, solo utiliza el título de la película, un huevo eclosionando cubierto por un resplandor verde y una frase inquietante: “En el espacio nadie puede oírte gritar”. Como curiosidad, el huevo que aparece en el poster no tiene nada que ver con los que se ven en la película. Es simplemente un huevo de gallina con algún retoque.
‘Vértigo’
Saul Bass es uno de los mejores ilustradores de la historia del cine. A lo largo de su carrera trabajó con muchos directores importantes, pero, sin duda, su nombre siempre irá unido al de Alfred Hitchcock, para quien diseñó numerosos carteles. El primero fue el de Vértigo. También creó la secuencia de los títulos de crédito, todo siguiendo la misma estética basada en espirales.
‘El silencio de los corderos’
Otro de los grandes posters que nos ha dado el séptimo arte. En él aparece Jodie Foster con una polilla sobre su boca. La polilla esconde una referencia oculta a la obra de Salvador Dalí. Este insecto tiene en el dorso del tórax un dibujo que se asemeja a un cráneo (de ahí que se le conozca como ‘la esfinge de la muerte’ o ‘la esfinge de la calavera’). En el caso de la polilla del cartel, el dibujo del cráneo fue sustituido por un trabajo fotográfico de Dalí titulado Involutas Mors y creado a partir de varios cuerpos de mujeres desnudas.
‘Regreso al futuro’
Drew Struzan firmó un diseño que resumía bastante bien el guion de la película. En el cartel aparecen el DeLorean sobre el suelo llameante y Marty McFly (Michael J. Fox), ataviado con chaleco rojo y zapatillas, mirando atentamente su reloj, para indicarnos que el tiempo juega un papel importante en la trama. “Nunca llegaba a tiempo a clase… No llegaba a tiempo para cenar… Hasta que un día, desapareció de su tiempo” es el copy.
‘Pulp Fiction’
Pero si hablamos de carteles de películas memorables, el de Pulp Fiction se lleva la palma. Imposible olvidar la imagen de Uma Thurman fumando tumbada boca abajo mientras lee una revista. Tanto es así que se ha convertido en una de las más icónicas de la cultura pop contemporánea.