Hollywood se levanta contra las restricciones al aborto
Actores, directores y empresas como Netflix, Disney o Warner han amenazado con dejar de rodar en Georgia si se ratifica la nueva ley

Desde que se aprobase en Georgia la conocida como “ley del latido del corazón”, que prohíbe el aborto una vez se pueda detectar latido fetal (lo que puede suceder antes incluso de la mujer sepa que está embarazada), han sido muchos los personajes de la cultura que se han posicionado en contra. Ahora la industria cinematográfica va un paso más allá y amenaza con boicotear al estado sureño si los trámites siguen adelante.
De cumplirse las amenazas, el boicot afectaría enormemente a Georgia, conocido como el Hollywood del sur. Es, tras California y Nueva York, el estado en el que más series y películas se ruedan. Solo el año pasado acogió más de 450 producciones, generando unos 2.700 millones de dólares en ingresos directos y más de 92.000 puestos de trabajo. Ha sido escenario, por ejemplo, de películas como Black Panther o la última entrega de Vengadores, End Game, y de series como The Walking Deado Stranger Things, entre muchos títulos.
Netflix fue la primera empresa del sector en anunciar que dejará de producir sus series y películas allí si la ley es ratificada el año que viene. También Disney y WarnerMedia han hecho la misma advertencia. Todas insisten en que la norma haría imposible el trabajo. “Será muy difícil seguir filmando en Georgia. Creo que muchas personas que trabajan para nosotros no lo harán. Queremos trabajar allí, pero tendremos que atender sus peticiones en ese sentido”, ha explicado, en declaraciones a Reuters Bob Iger, CEO de Disney. Por su parte WarnerMedia, propietaria de HBO, Turner y Warner Bros, ha emitido un comunicado afirmando que se verán obligados a “reconsiderar Georgia como hogar de cualquier nueva producción”.
Otras productoras como CBS, Showtime, NBCUniversal, AMC Networks, Sony Pictures, STX y Viacom acaban de anunciar que también considerarán dejar de rodar en Georgia porque muchos actores y directores ya han manifestado que no trabajarán allí. En marzo, Alyssa Milano dirigió una carta abierta al gobernador de Georgia Brian Kempt firmada por decenas de actores como Christina Applegate, Alec Baldwin, Ben Stiller, Amy Schumer o Sean Penn, entre otros. "No podemos, con buena conciencia, seguir recomendando que nuestra industria permanezca en Georgia si la H.B.481 se convierte en ley", decía.
To @BrianKempGA & Speaker Ralston: — Alyssa Milano (@Alyssa_Milano) 28 de marzo de 2019
Attached, is an open letter signed by 50 actors against #HB481. On behalf of the undersigned--as people often called to work in GA or those of us contractually bound to work in GA--we hope you'll reconsider signing this bill. #HBIsBadForBusinesspic.twitter.com/DsOmAWYU2x
Milano también hizo hace unas semanas un llamamiento a todas las mujeres para que se pusieran en huelga de sexo como medida de protección ante la ofensiva de varios estados contra el aborto. También ha anunciado que no seguirá participando en Insaciable, la serie de Netflix en la que actúa, si se sigue rodando en territorio georgiano.
En la misma línea, el actor y director Jason Bateman, cuyas series Ozark y The Outsider se graban también allí, afirmó hace unos días en una entrevista con The Hollywood Reporter que no trabajará en Georgia ni en ningún otro estado “que atente contra los derechos de las mujeres”. Por su parte, la directora Reed Morano, responsable de varios episodios de El cuento de la criada, que planeaba rodar su próxima serie, The power, en el estado sureño, ha anunciado que ya no se grabará allí. La actriz Kristen Wiig también ha suspendido el rodaje de su próxima comedia, Barb and Star go to Vista del Mar.
Aunque gran parte de la industria apoye el boicot, también hay quien, aun estando en contra de la nueva legislación, considera que la solución para no es perjudicar al estado y sus trabajadores. Así opinan el guionista ganador de un Oscar por Déjame Salir, Jordan Peele, y el productor y director J.J. Abrams, que han declarado conjuntamente que continuarán rodando en el Hollywood del sur su próxima serie para HBO. Eso sí, donarán sus sueldos a la Unión Americana de Libertades Civiles y a Fair Fight Georgia, dos organizaciones que lucha contra la restricción del aborto.