Odile Rodríguez de la Fuente: "No conectar con la naturaleza nos aísla, nos deprime y nos hace más vulnerables"
La bióloga, hija de Félix Rodríguez de la Fuente, acaba de publicar el libro 'La historia más fascinante del mundo'
Su amor por la naturaleza y el universo comenzó en su infancia, porque tener un padre llamado Félix Rodríguez de la Fuente marca mucho. De él aprendió una de las lecciones más valiosas que, a su vez, ha intentado transmitir a sus hijos: la importancia de permanecer fiel a uno mismo y cómo al alegir un camino que te permite realizarte, puedes influirpositivamente en la vida de otras personas. Como bióloga, el suyo está centrado en divulgar el reto que supone para la humanidad el cambio climático. Aprovechamos la publicación de su libro La historia más fascinante del mundo (Editorial Molino) para charlar con Odile Rodríguez de la Fuente sobre la vida en el planeta.
¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?
Siempre he sentido una gran curiosidad por la historia de nuestro planeta y la vida. Me hacía preguntas como ¿cuántos años tiene nuestro planeta?, ¿cuándo, cómo y por qué apareció?, ¿cómo surge la vida?, ¿han existido cambios climáticos en el pasado y por qué?, ¿Cómo aparece la conciencia?. Esa inquietud me llevó a documentarme y al hacerlo me topé con un reloj de veinticuatro horas que se usaba como herramienta para hacer más fácilmente asimilable la edad de la Tierra y los principales acontecimientos en su extensa historia. A partir de ese momento empecé a utilizar el reloj en mis charlas y comprobé que funciona especialmente bien con los niños. La editorial vio un vídeo en el que explicaba a unos niños la historia de la Tierra usando el reloj y se pusieron en contacto conmigo para invitarme a escribir un libro sobre ello.
¿Cuál es la originalidad de ‘La historia más fascinante del mundo’?
El uso del reloj, las ilustraciones maravillosas y que utiliza, como hilo conductor, una visión científica de vanguardia que estudia nuestro planeta como una unidad. Un sistema vivo planetario capaz de auto regularse.
¿Por qué es importante saber cómo se forma la vida?
Porque es el fenómeno más asombroso que existe. Todavía hoy los científicos no se ponen de acuerdo en cómo definirla, en cómo empezó o en qué es la conciencia y como se genera.
¿Qué supone ser la hija de Félix Rodríguez de la Fuente?
Un privilegio extraordinario.
¿Qué aprendizajes de él siguen inspirando su vida?
¡Muchos! Si tuviera que elegir, el ejemplo de tener un padre que concibió una profesión a la medida de sus talentos y pasiones y con ello alcanzó a vivir una vida sumamente plena puede que sea el más importante. Quizá también la inspiradora lección de permanecer fiel a uno mismo y cómo al elegir un camino que te colma y te permite realizarte puedes influir la vida de muchas otras personas positivamente.
¿Qué recuerdos guarda de él?
Su pasión, su presencia, la seguridad que emanaba, su curiosidad. Sus abrazos, su voz, su mirada…
¿Trata de inculcar esos valores que tanto defendió su padre a sus hijos hoy?
Claro. Esos valores han sido una guía existencial en mi vida y espero que lo sean también en la de mis hijos.
¿En qué momento está en el planeta?
En un momento sumamente crítico. Nunca, en la historia de la Tierra, se han visto tan alteradas, tan sumamente rápido, las principales esferas que conforman el sistema vivo planetario: la hidrosfera, la atmósfera, la geosfera y la biosfera.
¿Qué mensaje mandaría a las nuevas generaciones?
Que abrirse a la VIDA (con mayúsculas) es abrirse a la esperanza, al entusiasmo, a la sabiduría, al asombro, al empoderamiento, a la belleza, a la plenitud… En definitiva, que no hay nada más extraordinario que el milagro de formar parte de un universo capaz de mirarse a sí mismo y hacerse preguntas.
¿Por qué es tan importante conectar con la naturaleza?
Porque no hacerlo nos aísla, nos deprime y nos hace más vulnerables. Sabernos y sentirnos parte de algo mucho mayor que nosotros da un sentido profundamente trascendental a nuestras vidas.
