Las diez jugadoras noruegas de balonmano playa han sido sancionadas con 150 euros cada una por la Federación Europea de Balonmano (EHF). El motivo es que usaron pantalones cortos en vez de la parte inferior del bikini durante el partido por el tercer puesto del Campeonato de Europa que tuvo lugar en Varna (Bulgaria) el pasado fin de semana y que perdieron contra España.

En un comunicado, la Federación justifica que el equipo noruego “jugó con pantalones cortos que no están autorizados por el Reglamento del Uniforme de Atleta definido en las reglas de balonmano playa de la EHF”. La actual norma exige que los laterales del bikini no tengan más de diez centímetros y que este tenga “un ajuste ceñido”. Los hombres, por su parte, pueden llevar pantalones cortos de hasta diez centímetros por encima de las rodillas, siempre que no sean “demasiado holgados”.

Al parecer, las jugadoras nórdicas llevaban meses protestando contra una regla que consideran sexista y han solicitado en reiteradas ocasiones poder usar shorts de más de diez centímetros, pero las autoridades competentes han hecho caso omiso de su petición, por lo que decidieron romper las reglas en el encuentro contra España para señalar el doble rasero que se aplica a las atletas. La federación de su país ha anunciado que se hará cargo del pago de la multa.