La presión (tanto la social como la autoimpuesta) es la mayor carga para las madres y padres recientes
Falta de preparación y soledad son también sentimientos habituales entre quienes tienen hijos pequeños

Como sabe cualquiera que haya tenido un hijo, la presión, tanto externa como la que ejerce uno sobre sí mismo, puede ser un grave problema. Es, de hecho, el mayor obstáculo con el que se encuentran los nuevos padres y madres a la hora de afrontar la crianza de sus hijos, según el informe The Parenting Index. Realizado por la empresa de investigación Kantar para Nestlé, el estudio ha encuestado a 8.000 padres y madres con bebés de 0 a 12 meses y de dieciséis países -entre ellos, España- sobre la experiencia de la paternidad. Más del 50% de ellos aseguran sentir una fuerte presión social sobre la forma de criar a sus hijos, casi un tercio (31%) admite no sentirse preparado para la realidad de convertirse en padre o madre y más de la mitad (53%) reconoce que ha asumido más compromisos de los esperados. Además, pese a vivir en un mundo hiperconectado, el 32 % de los nuevos padres y madres se sienten solos en esta etapa.
Si nos centramos en los resultados por países vemos que España va a la cabeza en el reparto de tareas entre los progenitores, obteniendo la segunda mejor puntuación en el ranking de países sobre esta cuestión. Aunque todavía queda mucho por recorrer en el camino de la corresponsabiliad, el 64% de los españoles afirma que las responsabilidades del cuidado de los hijos se distribuyen equitativamente entre los dos integrantes de la pareja. Las madres y padres españoles también perciben positivamente el acceso a los recursos en materia de salud y bienestar. Más del 80% cree que tiene a su alcance un sistema de salud adecuado para atender a sus hijos.
Sin embargo, España ha obtenido la penúltima peor puntuación en lo que respecta a la conciliación. Solo el 36% de los encuestados en nuestro país considera que puede conciliar su profesión con la crianza. El dato español está 15 puntos por debajo de la media internacional y es hasta 31 puntos inferior al de Suecia, el país donde ven los padres ven más facilidades para criar a los hijos (China es el lugar donde las familias perciben más obstáculos). Cabe destacar que España, junto con China e Israel, tiene la mayor proporción de nuevos padres y madres que trabajan a tiempo completo.
Siguiendo con los resultados de nuestro país destacan datos como que el 37% de las nuevas madres reconoce haber padecido depresión postparto y solo la mitad piensa que es cómodo dar el pecho fuera de casa cuando lo necesita. En cuanto a la presión social sobre la forma de criar a los hijos, España se sitúa por debajo de la media: el 39% de los padres y madres dicen sentirla. El 23% dice aquí que la crianza es más difícil de lo que pensaba y el 33% ha asumido más compromisos de los esperados. En España, el 20% de los progenitores se sienten solos.
El sondeo inicial se realizó en enero y febrero de 2020, pero con el inicio de la pandemia de COVID-19 se volvió a encuestar a los padres y madres de algunos de los países más afectados durante la primera ola (China, España y Estados Unidos) para analizar el impacto que estaban teniendo en las familias las restricciones y medidas adoptadas por los países para frenar el avance del virus. Esas 900 entrevistas adicionales indican que el confinamiento no ha cambiado significativamente lo que sienten los padres sobre su experiencia de crianza. En todo caso, las pequeñas variaciones registradas fueron positivas, ya que los progenitores afirmaron haberse apoyado más entre ellos y mostraron una mayor cohesión y sentido de pertenencia. Además, la presión social que dicen sentir sobre cómo criar a los hijos se redujo.