María José Millán (AGR Food Marketing): “La mejor comercial que he tenido nunca es una persona sorda cuyo talento estuve a punto de perderme”
La CEO de AGR Food Marketing responde al primer MAS Directivas de la temporada

Inició su carrera académica como investigadora en Birkbeck College (Universidad de Londres) y posteriormente como profesora asociada en la Universidad de Southampton. Tras su regreso a España, María José Millán trabajó en CuldeSac y lideró el departamento de estrategia en la multinacional We Are Marketing. En 2022, se unió a AGR Food Marketing para liderar la transformación de la agencia, con el objetivo de convertirla en un grupo de marketing agroalimentario de referencia en Europa. Además, es accionista de Visualfy, startup que emplea inteligencia artificial para la inclusión de personas sordas, y colabora activamente con proyectos de impacto social como Adcam Project en Kenia y Flores Solidarias, una floristería online que da empleo a personas sin hogar. Este año ha sido una de las cincuenta directivas elegidas por el Santander para participar en su programa de liderazgo femenino SW50.
¿Qué querías ser de pequeña? De pequeña leía vorazmente novelas de aventuras, a lo Don Quijote, y era muy callada y observadora, no como ahora, que hablo por los codos. Quise ser maestra, policía, traductora, diplomática, política, empresaria, corresponsal de guerra… Dependía de lo que estuviera leyendo, de a quién hubiera visto en la tele o de alguna persona fascinante que acabara de conocer. Al final, todas esas profesiones tenían algo en común: observaban, preguntaban, traducían, protegían o explicaban. Supongo que siempre me gustaron las personas y que quería entender el mundo para hacer algo al respecto… o al menos para narrarlo con sentido.
¿Cómo recuerdas tu primer día de trabajo? Mi primer trabajo fue en la pescadería de Mercadona, para pagarme la carrera. Un desastre: aprobé la formación gracias a Matías, un compañero que me limpiaba el pescado cuando el formador no miraba. Pero el día real, Matías no estaba, y lo mío con las anguilas fue digno de una horror movie, había sangre por todos lados. El encargado me mandó directa a congelados a pesar croquetas. Años después me encontré a Matías en Instagram, él sí se quedó en Mercadona, ¡y seguimos en contacto! Mi primer trabajo en comunicación fue en Birkbeck College, Universidad de Londres. Fue como abrir una puerta a otro mundo. De pronto estaba en un entorno internacional, rodeada de gente brillante. Recuerdo que les enseñé a decir ‘agua chirli’ en lugar de café, esa fue mi aportación, y dejaron de decir ‘coffee’ para definir ese líquido marrón que bebían continuamente, pensando que así se decía café en español de la calle. Alguno vino a España y lo pidió así, convencido, en un perfecto español.
Descríbete con tres adjetivos. Apasionada. Determinada. Constante.
¿Tienes algún talento secreto? Mi talento es contar. Veo una historia detrás de cualquier cosa, el bosque en cualquier árbol. Recuerdo un viaje en el que un zapato de tacón rojo abandonado en el campo nos dio para fantasear y reírnos toda una semana. Cuando queráis os cuento un asesinato que nunca se produjo, y también donde está el otro zapato y a quién pertenece. Un día publicaré un libro con estas historias improvisadas con las que de momento atormento a quién me soporta.
¿Cuál es el mejor consejo que has recibido nunca? Hay tiempo para todo.
Elige una mujer cuya carrera te haya inspirado. Suena muy grande, pero he leído mucho sobre Teresa de Calcuta y me inspira muchísimo su manera de verse en el mundo y de entender el liderazgo como servicio.
Y una empresa (que no sea la tuya) que admires especialmente. De fuera del sector de la publicidad me encanta A24 porque, en un mundo en el que los algoritmos nos cierran la mirada, nos la abre y educa ofreciéndonos películas raras, incómodas, existenciales, que corrigen la visión túnel en la que todos estamos cayendo con las plataformas. Como publicista, admiro su narrativa, su estética, lo disruptivo de su propuesta de comunicación. De publicidad últimamente sigo con mucho interés el trabajo de Uncommon Creative Studio. Me recuerda a mi etapa de CuldeSac, cuando explorábamos la ‘no publicidad’, desde Valencia al mundo. En general, me inspiran las marcas que cuentan haciendo.
¿Cuál ha sido tu mayor reto profesional hasta la fecha? Mi mayor reto fue dirigir un equipo de marketing y comercial que incluía personas sordas y oyentes en Visualfy, una startup de la que soy accionista, superando el paternalismo que a todos nos nace ante la discapacidad. La mejor comercial que he tenido nunca es una persona sorda cuyo talento estuve a punto de perderme. Una gran lección, aplicable al liderazgo de cualquier equipo en cualquier empresa.
Si pudieras cambiar una cosa de ti, ¿cuál sería? Me gustaría aprender a aceptar que hay cosas que no dependen de mí o de mi esfuerzo. Que pasan sin más, por mucho que yo me empeñe en lo contrario.
¿Cuál es el mejor cumplido que te han hecho? “Trabajaría de nuevo con ella sin pensarlo”. Está en mi linkedin, viene de una persona con un talento brutal que tuve la oportunidad de dirigir cuando él empezaba, y me encanta que tenga ese recuerdo de mí una persona con una mente tan maravillosa.
¿A qué hora te has levantado esta mañana? A las 6 de la mañana.
Si tuvieses que elegir una profesión diferente, ¿cuál sería? Escritora de novela negra o librera en la librería Negra y criminal, del gran Paco Camarasa.
¿Qué te hace reír? El humor inteligente y con un punto dark.
¿Y lo que más te enfada? La falta de generosidad.
¿Quién es la persona viva a la que más admiras? Mis padres, a partes iguales. Sacaron adelante solos a cuatro hijas y les dieron estudios sacrificando todo.
¿Cuál es tu mejor recuerdo de la infancia? Hacer cabañas en la pinada de detrás de mi casa.
Recomiéndanos un libro, un disco, una serie y una película. Me cuesta elegir un libro porque soy un ratón de biblioteca, pero para quien no lo haya leído y especialmente en los tiempos que corren, releería Nuestro hombre en La Habana de Graham Greene. Qué envidia, porque se van a reír mucho y van a aprender de aspiradoras y espías. Un disco, Astral weeks de Van Morrison, no sé por qué descubrí tan tarde a este señor. Una serie, ahora que andan los centennials revisitando clásicos, Doctor en Alaska. Y una película, aun a riesgo de no ser original y volviendo al presente, El mejor trabajo del mundo. In love con su mensaje: “hazlo tan bien que nadie pueda ignorarte”.
¿Qué es lo que más valoras en un compañero de trabajo? La sinceridad, que para mí es el mayor síntoma de que la persona y lo que hace te importa lo suficiente como para enfrentarte a una conversación incómoda.
¿Qué haces para desconectar del trabajo? Camino por el campo con mi perrita, Wilma.
¿Qué país te gustaría visitar? Ahora mismo, Costa Rica.
¿Dónde te ves dentro de diez años? Viajando por el mundo mezclando alegremente trabajo y placer, aportando mucho valor en proyectos y clientes que lo merecen y valoran, bien pagada y feliz. Casi casi lo tengo.