El legado de Isak Andic, el hombre tras una de las marcas de moda más reconocidas de nuestro país
El fundador de Mango ha fallecido este sábado a los 71 años

Quienes le conocían hablan maravillas de él. Y no solo de su talento empresarial, sino de su calidad humana y su generosidad. “Isak ha sido un ejemplo para todos nosotros”, destacaba de él en un comunicado Toni Ruiz, actual consejero delegado de Mango. “Su legado refleja los logros de un proyecto empresarial marcado por el éxito, y también por su calidad humana, su proximidad y el cuidado y cariño que, siempre y en todo momento, ha trasladado a toda la organización”. Isak Andic, el fundador de Mango, fallecía repentinamente este sábado tras sufrir un accidente de senderismo a los 71 años.
Aunque actualmente ocupaba el cargo de presidente no ejecutivo de Mango, Andic seguía estando muy presente supervisando los movimientos de la empresa y visitándola casi a diario. En marzo de este año, el Rey le entregó una de las distinciones más importantes que se le puede hacer a un empresario en nuestro país: el Premio Reino de España a la Trayectoria Empresarial.
Nacido en 1953 en Estambul, de origen sefardí, a los catorce años Andic se mudó con su familia a Barcelona, ciudad en la que erigió su imperio textil, hoy valorado en miles de millones. Mango cerró en julio el mejor semestre de su historia con una facturación de casi 1.550 millones de euros. Además, la firma está inmersa en un proyecto de expansión internacional centrado en Europa y Estados Unidos (el propio Andic estuvo presente en la inauguración en 2022 de una tienda en la Quinta Avenida de Nueva York).
Andic es un claro ejemplo de empresario hecho a sí mismo. Una década antes de fundar Mango abrió su primera tienda con ropa que importaba de Turquía. Lo hizo en el Mercadillo de Balmes. Poco a poco se fue expandiendo y alquiló locales más grandes para vender todo tipo de ropa y complementos que consideraba que podían gustarle a la gente. Así, reunió el capital para abrir en 1984 la que sería la primera tienda de Mango, situada en el emblemático Paseo de Gracia, pasando de vender ropa de terceros a crear su propia marca. Abrió entonces unas instalaciones en Sabadell en las que se diseñaba y se llevaban a cabo todas las fases creativas. Aquel taller fue el antecesor de El Hangar Design Centre, el actual centro en el que se diseñan las colecciones de Mango, situado en Palau-solità i Plegamans.
En sus primeros años, Mango consolidó su presencia en España, abriendo más de cien tiendas en una década, y en 1992 inauguró su primer local fuera de nuestro país, en Portugal. Desde entonces, el crecimiento de Mango ha sido imparable, al igual que el patrimonio de su fundador, que Forbes estima en 4.500 millones de euros, siendo uno de los hombres más ricos de nuestro país. Contaba con una sociedad patrimonial, Punta Na, en la que incluyó a sus tres hijos, Jonathan, Judith y Sarah.
A lo largo de su trayectoria, el empresario no solo creó una de las marcas españolas más reconocidas, también ocupó cargos como miembro del consejo asesor internacional de la escuela de negocios IESE (IAB), vicepresidente de Banco Sabadell y miembro del International Advisory Board de la Generalitat de Catalunya, del Investment Advisory Council for Turkey y de la Fundación Amigos del Museo del Prado. Además, fue presidente del Instituto de Empresa Familiar, desde 2010 hasta abril de 2012, y patrón de la Fundación MACBA, la Fundación Princesa de Asturias, del Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) y de la Fundación Elena Barraquer.