En 2014, cuando fundamos Platanomelón, era usual que los sex-shops fueran lugares oscuros y morbosos que no respondían a las necesidades y deseos de un sector de la sociedad. El anhelo de dar respuesta a ese público, para que pudiera disfrutar de su sexualidad desde otro prisma, fue el principal motor de nuestra marca. Para alejarnos de lo establecido apostamos por una imagen de marca cercana y colorida, diseñando juguetes y complementos con colores vivos, amigables y poco realistas. Otro de nuestros puntos fuertes es la labor divulgativa que llevamos a cabo en torno a la sexualidad y que ayuda a nuestra comunidad, formada ya por más de cinco millones de usuarios, a mejorar su salud sexual y descubrir nuevas prácticas y juguetes.

 ¿Cómo es el proceso de creación de un juguete erótico?

Se basa en la combinación de varios factores claves. Uno de ellos es que trabajamos de la mano de nuestros usuarios para entender sus necesidades y deseos. Lo hacemos gracias a la retroalimentación directa a través de encuestas, feedback en redes sociales, sesiones creativas, etcétera. De esta manera podemos responder a sus demandas para identificar las tecnologías que mejor se adapten a ellos. Otros factores decisivos son la seguridad y la calidad del producto final. Durante las fases de diseño y desarrollo de los productos los testeamos e iteramos infinidad de veces con sexólogas expertas. Cuando el proyecto está avanzado, lo testeamos también con potenciales clientes para poder fabricar el producto final perfecto. Todos los materiales con los que trabajamos son de máxima calidad de grado médico. Además, nos esforzamos por mantenernos a la vanguardia de la innovación en la industria, monitorizando de cerca los avances tecnológicos aplicables a los juguetes eróticos y explorando nuevas funcionalidades que puedan proporcionar un mayor placer, personalización y comodidad.

¿Os compran más los hombres o las mujeres?

El perfil de nuestras clientas es mayoritariamente femenino, con edades entre los 25 y los 35 años. Por norma, nuestras clientas se animan a comprar su primer juguete en Platanomelón y, tras una experiencia de compra positiva, deciden seguir descubriendo nuestro amplio abanico de productos. Son personas que buscan experimentar sensaciones nuevas y redescubrir su sexualidad tanto en solitario como en pareja. Este año queremos ampliar horizontes y buscamos llegar a públicos más adultos que, hasta el momento, no se habían animado a experimentar con nuestros juguetes. Estamos invirtiendo gran parte de nuestros esfuerzos en ahondar en las necesidades de estas mujeres de más de 35 años y desarrollar contenidos y productos acordes a su contexto vital.

“En 2014, cuando fundamos Platanomelón, era usual que los sex-shops fueran lugares oscuros y morbosos”

Mambo es uno de vuestros productos estrella. ¿Crees que, con el éxito de los succionadores de clítoris, la masturbación femenina es un tabú que hemos derribado definitivamente?

Conseguir que la masturbación femenina se convirtiera en el centro del debate en entornos cotidianos fue un proceso lento y de mucho trabajo. En Platanomelón hemos luchado desde nuestros inicios por naturalizar la masturbación, la sexualidad, el uso de juguetes y el placer. Nuestra clave ha sido dar peso a la divulgación de información veraz entorno la sexualidad, la educación sexual y la masturbación, abalada siempre por nuestro equipo de sexólogas. Es cierto que con el lanzamiento de los succionadores se consiguió derribar gran cantidad de mitos y tabúes en torno a la masturbación femenina, pero es realmente importante recordar que no fue el único hito que ayudó a conseguir este progreso. El lanzamiento de la serie Sexo en Nueva York o Cincuenta sombras de Grey también incidieron en la importancia de tratar estos temas que hasta el momento habían sido olvidados. Pese a que con el éxito de los succionadores de clítoris la masturbación femenina se puso en el centro, creemos que aún queda mucho por hacer entorno a la educación sexual y el autoconocimiento.

¿Vamos mejorando en esta área?

A nivel social hemos hecho un gran recorrido. Sin embargo, todavía nos encontramos con situaciones en las que permanecen algunos tabúes, prejuicios y falta de información de calidad sobre sexualidad. Es el motivo por el que seguimos trabajando en la divulgación y en generar un cambio positivo en la sociedad de la mano de nuestro equipo de sexólogas.

Platanomelón ha dado el salto a México y Portugal. ¿Tenéis la vista puesta en otros mercados?

Aparte de en México y Portugal también estamos focalizados en Colombia. A futuro nos encantaría seguir abriendo nuevos mercados y hacer llegar el mensaje de Platanomelón a todo el mundo.

“El proceso de emprendimiento es una montaña rusa de emociones de la que en ocasiones te caes, pero siempre tienes que levantarte”

Ha pasado una década desde que creaste la empresa. ¿Qué sabes ahora que te hubiera gustado saber cuándo te lanzaste a emprender?

La importancia de trazar un buen plan y formularlo con cabeza, teniendo en cuenta las necesidades y los objetivos que busca cumplir la marca. Además, remarcaría la importancia de tener claro al target al que quieres dirigir tus productos, acorde con la inversión y la estrategia desarrollada. Algo que no te cuentan al emprender es que hay momentos en los que es necesario asumir ciertos riesgos para lograr conseguir tus objetivos. El proceso de emprendimiento es una montaña rusa de emociones de la que en ocasiones te caes, pero siempre tienes que levantarte.

¿Y dónde te gustaría ver a Platanomelón en otros diez años?

En los próximos diez años, me encantaría seguir creciendo como marca y hacer llegar nuestro mensaje a muchas más personas. Seguir apostando por nuestra expansión internacional y lograr así romper con los tabúes sobre sexualidad alrededor del mundo. Que la sexualidad y la educación sexual no sea una tarea pendiente a nivel social. Haber logrado naturalizar completamente la sexualidad y que forme parte de nuestra comunicación cotidiana. Por último, me gustaría poder ir un paso más allá en cuanto a estrategia de negocio, y poder materializar una tienda física propia en la que poder vender nuestros productos y ser más accesibles para nuestros clientes ofreciéndoles una experiencia aún más personalizada.