Igualdad=riqueza (y los países nórdicos lo demuestran)
Las políticas de igualdad son la clave de su desarrollo económico, según la OCDE

No lo decimos nosotras, lo dice la OCDE: las políticas de igualdad de géneros favorecen el desarrollo económico de las naciones. Y el mejor ejemplo, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, son los países nórdicos.
Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia, pioneros en la aplicación de este tipo de medidas, son también los países europeos más ricos. ¿Coincidencia? No, según el organismo, que señala que las décadas de políticas en favor de la igualdad y la incorporación de la mujer en el mercado laboral han propiciado un incremento del PIB de estos países de hasta el 20%. Y de seguir en esta línea, en 2040 la cifra podría alcanzar el 30% del PIB . Actualmente las tasas de empleo femenino de la región se sitúan entre el 68% y el 83%, muy por encima del 59% de media de los países que integran la OCDE.
Por eso Ángel Gurría, su secretario general, opina que "los países nórdicos son una inspiración" y señala que las estructuras diseñadas para apoyar a las familias son clave en este sentido. "Los países nórdicos proporcionan una amplia gama de asistencia a las familias con niños, que incluyen generosos permisos pagados para padres primerizos; enseñanza y cuidados preescolares de calidad subsidiados; y atención en las horas extraescolares”, recuerda. Lo que también tiene que ver con que encabecen sistemáticamente los rankings mundiales de felicidad.
Cuando en otros lugares estas cosas ni se planteaban, allí ya se estaba legislando sobre el tema. Dos ejemplos: la ley sueca que impiden a las empresas despedir a las trabajadoras embarazadas data de 1939 y la ley noruega que da independencia fiscal a las mujeres es de 1959. A día de hoy siguen siendo pioneros. Hace unos meses Islandia se convertía en el primer país en garantizar por ley la igualdad salarial. Y su intención es seguir avanzando. También el año pasado, los primeros ministros de los cinco países nórdicos pusieron en marcha la iniciativa Nordic Sollutions to Global Challenges, para, entre otras cosas, hacer frente a la desigualdad de género. Los cuatro pilares para alcanzar su objetivo son: baja paternal compartida, guarderías asequibles de calidad, flexibilidad en los horarios laborales y prácticas para favorecer la conciliación desde el punto de vista organizativo.