Rihanna S.A.
La cantante ha presentado en Madrid su nueva y exitosa línea de maquillaje, la última incorporación a su imperio empresarial

Rihanna llegó, vio y venció. La cantante de Barbados estuvo el sábado en Madrid para presentar su línea de maquillaje Fenty Beauty, de venta exclusiva en Sephora. Aunque en teoría era un acto privado, al final se convirtió en un evento multitudinario con centenares de fans (tuvieron que cortar la Gran Vía), mucho famoseo e influencers.
Madrid ha sido, tras Nueva York, Londres y París, la cuarta parada del tour que Rihanna está haciendo para promocionar su nueva marca. El lanzamiento mundial de Fenty Beauty se produjo de manera simultánea el pasado 8 de septiembre en las más de 1.500 tiendas que Sephora tiene en diecisiete países. Incluye un total de 91 referencias, entre correctores, polvos, iluminadores, labiales y una base de maquillaje con 40 tonalidades distintas que se adaptan a cualquier piel, incluidas las más oscuras. Es precisamente esa variedad lo que ha convertido a Fenty Beauty en un éxito inmediato. Especialmente en Estados Unidos. El 38% de las estadounidenses son no blancas, a pesar de lo cual, las marcas de belleza no han sido históricamente poco diligentes a la hora de ofrecer alternativas para las pieles más oscuras.
Según Forbes, la de Barbados ganó el año pasado 75 millones de dólares. Esa cifra la convirtió en la cuarta mujer de la industria musical por ingresos, por detrás de Taylor Swift (170 millones de dólares), Adele (80,5 millones) y Madonna (76,5 millones), pero por delante de Beyoncé (54 millones). La mayor parte de esos ingresos no proceden, excepto en el caso de Adele, de la venta de discos, sino de sus giras, campañas publicitarias y aventuras empresariales. En el caso de Rihanna, desde luego no lo fue: su octavo disco, Anti, lanzado en Tidal, la plataforma de streaming de la que es socia, tuvo el debut más flojo de toda su carrera, y eso que Samsung regaló un millón de copias a los usuarios de sus smartphones (la compañía hizo lo mismo en 2013 con el disco Magna Carta…Holy Grail del rapero Jay Z). Esa acción se enmarcaba en el acuerdo de patrocinio que firmaron la cantante y la empresa coreana, que algunas fuentes cifran en 25 millones de dólares.
Rihanna también se convirtió recientemente en imagen de Dior y protagonizó su campaña Secret Garden. Es la primera cantante que ha protagonizado uno de los fashion filmes de la firma, que hasta ahora había confiado principalmente en modelos o en actrices como Marion Cotillard, Natalie Portman o Jennifer Lawrence.
La de Barbados cuenta también entre sus padrinos con la firma de calcetines Stance y con Puma. De hecho, es directora creativa de la marca deportiva desde 2014. La presentación de la última colección Fenty x Puma (parece que para estas cosas prefiere usar su apellido, Fenty) se convirtió hace un par de semanas en el desfile más comentado de la Semana de la Moda de Nueva York. Un año antes Rihanna había elegido París para presentar su segunda colección de pasarela para la marca. Y sus zapatillas Fenty Puma Creeper fueron el éxito del año pasado en cuestión de calzado: se agotaron en 35 minutos. Ahora lo que vuelan son sus bases de maquillaje.

