Poniendo cara a las científicas españolas
Un centenar de estudiantes de 14 y 15 años han participado en el primer ‘science-dating’ con ocho científicas
Un centenar de estudiantes de tercero de la ESO cambiaron sus apuntes y libros por una jornada de ‘science dating’ con ocho científicas españolas. En rondas de diez minutos, los alumnos de los institutos madrileños Ramiro de Maeztu y del Centro Concertado Valdecas conocieron de primera mano las historias y anécdotas de la astrónoma María Asunción Fuente, la química y divulgadora científica América Valenzuela, la también química Carolina Rodríguez Ranera, la física Begoña de la Cruz, la bióloga Inmaculada Ibáñez, la ingeniera agrónoma Selena Giménez, la física Eva Cerezo y la matemática Clara Grima. Según esta última, es una forma de acercar la ciencia a los chicos y dar a las mujeres científicas “una visibilidad que ahora empezamos a tener, pero que no hemos tenido nunca”. “Te abre los ojos hablar con gente para la que la ciencia es su pasión”, explicaba Paloma, una de las estudiantes.
Además de como experiencia para los chavales, el evento sirvió para presentar la iniciativa #Ponlescara, una campaña en redes sociales que busca visibilizar y acercar el trabajo de las científicas del entorno más cercano. Es la última iniciativa del programa de L’Oréal-Unesco For Women in Science.
La compañía también entrega anualmente bolsas de investigación por valor de 15.000 euros a varias científicas. Lleva once años haciéndolo. En este tiempo ha apoyado a 52 científicas españolas con ayudas por valor de 890.000 euros. Este año, un jurado compuesto por Bernat Soria, María Blasco, María Vallet-Regí y Flora de Pablo, con Margarita Salas como presidenta de honor, han puesto cara a: Anna Laromaine, que investiga la interacción de nanopartículas con material biológico para aplicaciones médicas; Vanesa Esteban, que estudia las alergias desde el interior de los vasos sanguíneos para el desarrollo de terapias alternativas a la adrenalina; Azucena Bardají, que investiga la inmunización materna para evitar enfermedades como la tos ferina y el virus respiratorio sincitial en embarazadas y niños en sus primeros meses de vida; Jaione Valle, que estudia las proteínas bacterianas con comportamiento amiloide asociadas al biofilm -un ecosistema microbiano organizado- y cómo contribuyen al desarrollo de ciertas enfermedades, y Anna Shnyrova, que desarrolla un sistema in vitro para entender y controlar la dinámica de dobles membranas de las mitocondrias, fundamental en procesos como el Alzheimer, el envejecimiento celular o la apoptosis.