Helena Sotoca (Femme Sapiens): “Los museos no deberían romantizar la violencia sexual”
La divulgadora se ha hecho popular en redes gracias a sus memes feministas creados a partir de obras clásicas
Desde 2019, Helena Sotoca, más conocida en redes sociales como Femme Sapiens, se dedica a hacer divulgación de la historia del arte con perspectiva feminista. En su cuenta de Instagram, en la que acumula cerca de 290.000 seguidores, se vale del humor para hablar de las dificultades a los que se han enfrentado las artistas y de la forma en la que las mujeres han sido retratadas a lo largo de la historia, pero también para señalar el machismo de hoy. “Creo que el humor siempre es un bálsamo para llegar a todo el mundo. Sobre todo, cuando se trata de temas que pueden escocer, como el feminismo”. Tras su éxito en redes ha publicado su primer libro, Ni musas ni sumisas (Bruguera), y de la mano de Podimo se ha estrenado en el mundo de los pódcast con La maja sesuda.
Históricamente, el trabajo de las artistas femeninas ha sido invisibilizado. ¿Están cambiando las cosas? ¿Se están implicando ahora más los museos para mostrar el arte realizado por mujeres?
Algunos sí y otros no. Además, no es lo mismo el panorama español que el europeo. De todas maneras, creo que también es importante resaltar la realidad, y es que ha habido muchas menos grandes artistas mujeres que hombres, pero no porque nosotras pintemos peor. A las mujeres no se les ha permitido estudiar arte y por eso, al final, en los fondos de los museos hay muchas más obras de hombres. Por eso, buscar un 50-50 no es un objetivo realista. En un museo de arte contemporáneo podría ser, pero en uno de arte clásico nunca vamos a encontrar paridad. Ahora, sobre lo que sí podemos incidir es en cómo las mujeres aparecen representadas por los artistas hombres o cómo se nos relata lo que sucede en cuadros. Los museos no deberían romantizar la violencia sexual. No pueden destacar que Europa “está bellísima” y no hablar de que está siendo raptada por Zeus y tendrá un hijo contra su voluntad. O hablar de la “belleza de un cuerpo joven” cuando lo que tenemos delante es una niña. Lo más importante es que los museos cambien el relato. En España hay algunos como el Thyssen están haciendo un trabajo desde el feminismo y desde el anticolonialismo muy importante.
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¿Desde cuándo se estudia la historia del arte con perspectiva de género?
Desde los años Setenta. Pero una cosa es que exista la disciplina y que haya muchos escritos sobre el tema, y otra cosa diferente es que se aplique en los museos o en los ámbitos académicos. Poco a poco, sobre todo en Infantil y Primaria, he visto que se va haciendo un trabajo de, al menos, reivindicar a las artistas. Los niños ya no solo aprenden diez artistas y Frida Kahlo. Ahora, en algunos colegios, les empiezan a hablar de otras artistas. Hay una plataforma llamada La Roldana que tiene un montón de materiales, propuestas y guías didácticas para incluir en el currículum.
¿Cuál es el planteamiento de Ni musas ni sumisas?
Me parecía importante resaltar la falta de objetividad del discurso oficial de la historia del arte. En lugar de hacer un libro cronológico, como tantos otros libros de arte, lo organicé por temáticas y lo dividí en dos partes: por un lado, me interesaba hablar de la imagen de la mujer en la historia del arte y, por el otro, de qué había pasado con las mujeres artistas.
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También has creado el podcast La maja sesuda. ¿Cómo ha sido la experiencia?
A través de conversaciones con mujeres que para mí son referentes, como Victoria Martín, Rigoberta Bandini, Carmen Iglesias o Flavita Banana, abordo temas que de alguna manera podrían afectar a nuestra vida y luego lo completo con información sobre obras de arte en las que aparecen esos mismos temas. Mi idea era mostrar que las problemáticas actuales vienen de muy lejos y que las cosas que les pasaban a las mujeres que pintaba Rubens, posiblemente nos siguen pasando todavía hoy.
Para quien todavía no lo haga, ¿por qué deberían seguirte en las redes?
Mucha gente me dice ‘Helena, no me interesaba para nada el arte y me he cogido un viaje a Florencia porque me muero por ir a la Galería Uffizi por los cuadros de los que nos has hablado’. Me gusta generar interés sobre el arte en general, pero también ayudar a completar ese conocimiento, porque la historia del arte estaba incompleta hasta que se incorporó la perspectiva feminista.