La historia de A24, la productora que está revolucionando Hollywood
‘Todo a la vez en todas partes’, ‘Moonlight’ ‘Midsommar’ o ‘Lady Bird’ son algunas de las películas que han salido del estudio independiente más importante en la actualidad
Todavía hay gente recuperándose de la sorpresa de que Todo a la vez en todas partes, una película que mezcla artes marciales y multiversos, resultara la gran triunfadora en la última edición de los Oscar. Se llevó los premios a la mejor película, mejor dirección (para Daniel Kwan y Daniel Scheinert), actriz principal (Michelle Yeoh), actriz de reparto (Jamie Lee Curtis), actor de reparto (Ke Huy Quan), guion original y mejor edición. Se convirtió así en la película con más premios de la Academia de la historia. Esa misma noche, Brendan Frasier ganó el Oscar al mejor actor por su trabajo en La ballena. El filme de Darren Aronofsky, que cuenta la historia de un hombre con obesidad que no puede parar de comer por el dolor y la culpa tras haber perdido a su amado, se llevó también los reconocimientos a los mejores maquillaje y peluquería. Aunque muy diferentes entre sí, estos títulos tenían algo en común: habían sido producidos por la prolífica y exitosa A24.
Los Oscar confirmaron a esta productora independiente, con apenas una década de vida, como el estudio de moda en Hollywood. En sus poco más de diez años de vida, A24 ha logrado dos premios de la Academia en la categoría de mejor película (la citada Todo a la vez en todas partes y Moonlight) y su sello se ha convertido en sinónimo de originalidad y frescura, pero, sobre todo, de calidad.
Mientras las majors estaban preocupadas por el desafío que suponían Netflix y el streaming, no vieron venir a un pequeño estudio que sin hacer mucho ruido les adelantaba por la derecha. En la historia reciente de Hollywood, solo Miramax había sacudido la industria de forma parecida. En los noventa, la empresa fundada por los hermanos Bob y Harvey Weinstein se convirtió en una referente del cine independiente, confirmando que las pelis indies podían seducir al gran público. Los Weinstein demostraron un indiscutible olfato para el talento, dando su primera oportunidad a directores como Steven Soderbergh (Sexo, mentiras y cintas de vídeo), Quentin Tarantino (Reservoir Dogs) o Kevin Smith (Clerks). También A24 nos ha descubierto a algunos de los directores más interesantes de la nueva hornada: gente como Robert Eggers (responsable de La bruja o El faro), Ari Aster (el director de Hereditary, Midsommar y la reciente Beau tiene miedo), o Greta Gerwig (que rodó con A24 su debut como directora, Lady Bird).
Yorgos Lanthimos, Gus Van Sant, Noah Baumbach o Sofía Coppola también han hecho películas con esta productora fundada en 2012 por tres veteranos de la industria, Daniel Katz, David Fenkel y John Hodges, que, cansados de las películas que salían de los grandes estudios, querían llevar el cine en otra dirección. Figurada y literalmente, porque A24 tiene su sede en el extremo opuesto a la soleada california: Nueva York. Desde el principio apostaron por historias a los que las grandes productoras, más centradas en las sagas y las películas de superhéroes, no estaban haciendo caso. Spring breakers fue la primera película que produjeron, pero su nombre empezó a sonar más en 2015 gracias a títulos como Ex Machina, La habitación y La bruja. Su consagración definitiva llegó con Moonlight, ganadora del Oscar en 2017 (sí, el año del lío de sobres con La La Land). Un par de años antes, A24 había creado su división de televisión, de la que han salido títulos como Irma Vep, Beef y, sobre todo, Euphoria, la serie que ha encumbrado a Zendaya.
Las comparaciones con Miramax son inevitables, pero también son notables las diferencias. Sus responsables, Katz y Fenkel (Hodges dejó la compañía en 2018), no conceden entrevistas y evitan a toda costa el protagonismo, justo lo contrario de lo que hacían los Weinstein. A diferencia de los hermanos, que se hicieron famosos por tener la mano larga en la sala de montaje, A24 se ha labrado fama de refugio de creadores, un lugar donde se respeta la visión del director. La productora trabaja bien el marketing, pero nada que ver con las agresivas campañas, amenazas incluidas, con las que los Weinstein lograban posicionar sus películas de cara a los premios. Habrá que ver si el final de la historia de A24 es también diferente al de Miramax, que acabó absorbida por Disney. De momento, a finales de julio estrenará otra película de terror, Háblame, y el año que viene llegarán Priscilla, la película sobre Priscilla Presley que dirigirá Sofia Coppola, y el filme de acción Civil war, dirigido por Alex Garland y protagonizado por Kirsten Dunst.