El álbum Private dancer, publicado en 1984, fue el primero de Tina Turner en solitario. Vendió cinco millones de copias y la convirtió en una estrella internacional.  Después llegaron discos como Break every rule (1986) y Foreign affair (1989). A mediados de los noventa recuperó la notoriedad gracias al estreno de una película sobre su vida, What’s love got to do with it (en España se llamó simplemente Tina), y al éxito de la canción que grabó para la saga James Bond.

A lo largo de su medio siglo de trayectoria, Tina Turner grabó una larga lista de éxitos que combinaban, como pocos habían logrado hasta entonces, soul, R&B, funk, rock y pop.

‘River deep, mountain high’ (1966)

Por entonces, Ike y Tina seguían juntos, pero lo que a Phil Spector le interesaba era la portentosa voz de ella; a él le prohibió incluso acercarse al estudio. El exigente Spector obligó a Tina Turner a repetir la grabación una y otra vez hasta quedar satisfecho. Para cuando acabó, contó ella después, estaba tan empapada en sudor que se había quitado la camisa y cantaba en sujetador. El resultado es una pequeña joya, aunque en su momento pasó un poco sin pena ni gloria.

‘Funkier than a mosquita’s tweeter’ (1970)

La canción fue escrita por la hermana mayor de Tina, Alline Bullock, e incluido en el álbum Workin’ together. Nina Simone grabó unos años después una versión bastante diferente.

‘Proud Mary’ (1971)

El tema, original de la Credence Clearwater Revival (fue el primer número 1 de la banda), se convirtió otra vez en un éxito con la versión funk de Ike y Tina. En 2008, Turner la cantó junto a Beyoncé en la entrega de los Grammy.

‘Nutbush city limits’ (1973)

Uno de los últimos éxitos del dúo, fue también la primera canción escrita por Tina, que se basó para ello en su propia historia.

‘What's love got to do with it’ (1984)

Aunque fue el mayor éxito de su carrera, Tina Turner se resistió bastante a grabar What's love got to do with it. El tema, escrito por el dúo británico Terry Britten y Graham Lyle, ya había sido rechazado antes por Donna Summer. Afortunadamente, Turner cedió ante la insistencia de su manager. La canción lideró las listas de ventas de todo el mundo y ganó tres premios Grammy.

‘Private dancer’ (1984)

Mark Knopfler escribió Private dancer, pero en el último momento decidió que no se sentía cómodo cantando desde la perspectiva de una stripper y le pasó el tema a Turner, que lo grabó con los Dire Straits como banda.  

‘We don’t need another hero’ (1985)

Fue su contribución a la banda sonora de Mad Max: más allá de la cúpula del trueno, en la que también participó como actriz. La peli cosechó críticas mixtas, pero la canción gusta a todo el mundo.

‘The best’ (1989)

Había sido grabada por Bonnie Tyler un año antes, pero la versión que ha pasado a la historia es la de Turner. Un auténtico megahit.

‘Goldeneye’ (1995)

Bono y The Edge escribieron el tema que Turner grabó para la película con la que Pierce Brosnan se estrenó como James Bond. Fue el último gran éxito de la cantante.