iCon, el Fitbit del sexo
Así funciona el dispositivo que mide el rendimiento sexual

Aunque se anuncia como “el primer condón inteligente del mundo”, la verdad es que proteger, no protege de nada. En realidad, i.Con tiene más que ver con las pulseras de fitness, solo que en vez de colocarse en la muñeca se coloca en el pene, y en vez de datos sobre las sesiones de running, da las estadísticas de las relaciones sexuales.
Se trata de un anillo que se ajusta en la base del pene y recoge todo tipo de información relacionada con el rendimiento sexual, como número y velocidad (media y máxima) de las penetraciones, el tiempo total del acto, las calorías quemadas o cantidad de posturas utilizadas, entre otras cosas.
Está hecho de goma sintética y puede usarse con o sin el tradicional condón. Según sus creadores, “es extremadamente ligero y no invasivo”. Dicen que una vez finalizada la relación, basta con quitarse el i.Con (imaginamos que limpiarlo) y conectarlo al móvil para descargar e incluso compartir los datos. Todo ello gracias a la app que viene con el gadget, compatible con iPhone y Android.
Lo mejor es que parece que el dispositivo será capaz de detectar algunas enfermedades de transmisión sexual como la clamidia o la gonorrea, aunque no podrá evitarlas.
Todavía no está a la venta, pero ya puede reservarse a través de su web a un precio que ronda los 70 euros.
