Lejos de apagarse, las protestas surgidas a raíz de la muerte de la joven Mahsa Amini se intensifican tanto en Irán como fuera de sus fronteras. Más de 130.000 ciudadanos europeos han firmado ya la petición iniciada por la activista italiana Maria Dolores Porceddu para exigir a la ONU medidas de apoyo a las iraníes.

“Los iraníes exigen en las calles libertad, democracia y derechos humanos. En las últimas semanas, el mundo ha sido testigo del intento del Gobierno de Irán de silenciar las protestas con violencia. Miles de personas han sido detenidas y encerradas en cárceles ya superpobladas y en malas condiciones higiénicas. Las autoridades iraníes mataron a cientos de manifestantes e hirieron a muchos más. Las autoridades restringieron severamente el acceso a Internet para evitar que las imágenes llegaran a las redes sociales y a los periódicos de fuera del país”, dice el texto. 

Porceddu hace hincapié la ciudadanía y políticos de todo el mundo están “mostrando su apoyo a las protestas en irán y condenando la violencia del Gobierno” y exige a Naciones Unidas medidas en apoyo a las mujeres iraníes. Por un lado, pide a su Consejo de Derechos Humanos que convoque urgentemente una sesión especial sobre Irán. Además, solicita “como muestra de solidaridad y para honrar la lucha de las mujeres iraníes” que el país sea excluido “inmediatamente” de la comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (ECOSOC), el órgano intergubernamental de Naciones Unidas específico para la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer. “Un Estado que mata a las mujeres que se manifiestan pacíficamente en las calles de varias ciudades de Irán para exigir sus derechos no debería tener cabida en esta Comisión”, justifica la petición.