Cinco buenas razones para incorporar a más mujeres ‘tech’
Y cuatro ideas para conseguirlo

Que existe un preocupante retroceso en la participación de la mujer en el mundo de la tecnología es algo de lo que ya hemos hablado en muchas ocasiones. Solo el 3% de las mujeres tituladas en estudios superiores lo son en carreras consideradas tecnológicas y del conjunto de titulados en estudios tecnológicos, solo el 14,6% son mujeres. Las cifras son del informe Mujeres en la Economía Digital en España, que acaban de presentar DigitalEs (la patronal del sector) y la consultora Quanticae. Hemos extraído algunos datos e ideas que evidencian lo importante que es incorporarlas a uno de los sectores más trasversales e importantes para la economía.
Son los trabajos del futuro
El sector tecnológico tiene un problema de captación de talento, en general, y de captación de talento femenino, en particular. Tanto en España como en Europa son cada vez menos los jóvenes que optan por carreras tecnológicas, y las competencias y habilidades de los profesionales del sector no siempre son los más adecuados a las necesidades de la industria.
Las últimas estimaciones de la Comisión Europea indican que en el año 2020 habrá una demanda de 500.000 puestos de trabajo sin cubrir en la Unión Europea en el sector tecnológico. Además, las ocupaciones que podemos llamar digitales no son exclusivas del sector TIC estrictamente hablando, sino que cada vez más empresas de todos los sectores demandan profesionales digitales como programadores o especialistas en bases de datos y en redes informáticas.
Sería bueno para la economía
Según la Comisión Europea, la participación de la mujer en el mercado de trabajo digital al mismo nivel que los hombres podría generar un incremento anual del PIB de 9 millones de euros en la economía del continente.
Y para todos, en general
Es evidente que la transformación digital puede ayudar generar puestos de trabajo, mejorar nuestra calidad de vida, reduciendo desigualdades y ayudando a generar una economía más sostenible. Sin embargo, los autores del informe reconocen también que algunas innovaciones tecnológicas como la inteligencia artificial y la robotización “pueden tener efectos negativos indeseados, como la exacerbación de la desigualdad y la perpetuación de prejuicios, estereotipos y discriminación”. La escasa participación de las mujeres en el ámbito digital es parte esencial de ese problema. Y atraer a las mujeres a los estudios tecnológicos y al sector digital es, por tanto, vital para solucionarlo.
Aquí hay pasta
Los salarios son más de un 20% superiores a los de otros sectores. En concreto las mujeres cobran un 3,1% más que las mujeres con puestos similares de otros sectores.
La brecha salarial es menor (con matices)
Algunos estudios han contrastado que las diferencias salariales aumentan con la edad, la antigüedad en la empresa y son mayores en las grandes empresas que en las pequeñas. La brecha salarial es mayor, además, cuanto más altos son los salarios, es decir, en los puestos de mayor responsabilidad. A nivel general, se puede concluir que las mujeres cobran menos de media en España en los puestos de liderazgo que los hombres, pero es que además tienen muchas menos probabilidades de alcanzar puestos de responsabilidad.
El sector tecnológico no es ajeno a esta tendencia y según el análisis de los datos de Mujeres en la Economía Digital, la brecha salarial sin ajustar es de un 13,6% en el sector TIC, y del 13,5% en el resto de los sectores (usando la Encuesta Cuatrienal de Estructura Salarial del INE, cuyos últimos microdatos disponibles son de 2014). Sin embargo, la brecha salarial manteniendo iguales los factores como la edad, el tipo de contrato y de jornada, el tipo de empresa, tamaño de la empresa, región, antigüedad o nivel de estudios, es decir, considerando la brecha salarial ajustada, es del 8,9% en el sector TIC y del 14,2% en el resto de los sectores.
Los autores del informe señalan que esa importante diferencia entre brecha ajustada y sin ajustar en los salarios de las mujeres respecto de los hombres, indica también que las mujeres en el sector TIC tienden aún a ocupar puestos peor remunerados que los hombres, lo que les lleva pensar en el impacto que aún tiene el techo de cristal. Citan los estereotipos de género, el conocido como ‘síndrome del impostor’ o la ‘brecha de ambición’ como motivos.
Para todo hay solución
Para intentar resolver la situación, el informe propone algunas recomendaciones. Entre otras, dar visibilidad a modelos femeninos y referentes en el sector; mejorar el enfoque educativo y de formación para incluir y hacer más atractivas las materias relacionadas con la tecnología, con especial esfuerzo en la FP; impulsar la implantación de prácticas empresariales más inclusivas, y promover un modelo laboral que fomente la corresponsabilidad en el cuidado de las personas.