¿Cómo es un día en tu vida?

Como cualquier otra mujer que forma parte de esta industria, intento que mi día a día tenga un balance entre mi vida personal y mi vida laboral. En cuanto al trabajo, mi posición como COO cada día trae un nuevo reto que afrontar respecto a las necesidades de la compañía y de nuestros ‘Globers’. Todos los días son diferentes y emocionantes. Todo esto en balance con mi vida familiar, ya que para mí es muy importante el balance, estar presente también en el día a día de mi hija Filippa, y por eso busco que ella me acompañe en cada paso que doy también durante mi vida profesional. La maternidad ha sido uno de los hitos más importantes tanto en mi vida personal como en mi vida profesional. El hecho de ser mujer en un entorno corporativo predominantemente masculino me ayudó a entender la responsabilidad que tenemos las empresas y los líderes para dar visibilidad a la necesidad de la conciliación y de pensar en iniciativas y políticas que tengas esto en cuenta, y que ayuden a las mujeres a que puedan cumplir sus ambiciones profesionales sin renunciar a la maternidad.

Hace unos meses recibió un premio como mujer y COO. ¿Cree que todavía son necesarios este tipo de reconocimientos y por qué?

Creo que este tipo de reconocimientos a mujeres son realmente importantes, ya que nos permiten visibilizar la labor de la mujer, la fortaleza de las que luchan por romper techos y por convertirse en un referente y una inspiración para todas las que vienen detrás. Cuanto más espacio y visibilidad le demos a las mujeres más podemos demostrar a otras que todas somos capaces y que todas pueden sumarse a la industria y ejercer posiciones de liderazgo que abran puertas y marquen un cambio positivo. De hecho, nosotros en Globant lanzamos cada año los premios Women That Build con el objetivo de reconocer y dar visibilidad a las mujeres líderes en disciplinas tecnológicas, porque creemos que dar este reconocimiento a mujeres de diferentes edades y niveles de antigüedad permite construir una industria diversa e inclusiva y proporcionar a las niñas y mujeres de todo el mundo referentes femeninos en disciplinas STEAM, historias de éxito y superación.

Desde su responsabilidad actual, ¿cómo apoya a las mujeres que empiezan una carrera en el sector ‘tech’? ¿Qué les recomendaría?

Personalmente siento una enorme responsabilidad desde mi rol para promover la inclusión de más mujeres en tecnología y a más mujeres en liderazgo. En Globant no solo nos hemos puesto como objetivo alcanzar en 2025 la presencia de mujeres y personas de género no binario en el 50% de los puestos de liderazgo, sino que además acompañamos este objetivo con mentoría, incentivos y objetivos específicos para acompañar el crecimiento de liderazgo femenino en la organización. Adicionalmente, en la empresa tenemos nuestro programa Women that Build con el que diseñamos una ruta para acompañar a mujeres y personas no binarias a lo largo de las diferentes etapas de sus vidas, desde que están en la escuela hasta que comienzan su primer trabajo, para continuar con su desarrollo personal y profesional. En cada etapa (inspirar, educar, contratar, acompañar y liderar) hemos implementado una variedad de programas e iniciativas de capacitación para romper barreras y acompañarlos en su progreso hacia el liderazgo. A las mujeres que empiezan una carrera en una empresa tecnológica les pediría que confíen en sus instintos y que sigan su vocación. Todas ellas no solo tienen el compromiso con su propia carrera, sino también con todas las mujeres a las que van a servir como referente y como ejemplo de que nosotras también podemos llegar a donde sea que nos propongamos.

En su trayectoria profesional, la formación y la educación han estado siempre presentes, ¿cómo las tiene en cuenta en su labor actual?

Cuando trabajaba en el Ministerio de Educación de Argentina, implementé un proyecto para llevar tecnología a las escuelas rurales del país. Este valor sigue en mi trabajo en Globant. Creo que no hay un gen de talento. Es algo que se puede trabajar. En Globant expandimos donde podamos encontrar talento. Llevamos la empresa hacia el talento y no al revés (lo común de la industria). No solamente vamos a las grandes ciudades, y abrimos oficinas en Cali (Colombia), Ushuaia (Argentina), Málaga (España), por ejemplo.  Creo que tanto la formación como la educación son disciplinas que tienen que acompañar cualquier labor, en todos los momentos de nuestra carrera. Por un lado, por la necesidad de estar en constante formación y, por otro lado, por la labor de docencia, de enseñar a otros. El aprendizaje dentro de una empresa es sumamente importante en estos días, las empresas deben diseñar experiencias de aprendizaje para cada uno de sus empleados y brindarles las herramientas necesarias para tener un upskill y reskill a lo largo de sus carreras, teniendo en cuenta experiencias personalizadas de acuerdo con sus intereses, necesidades y estilos de aprendizaje, según lo que mejor encaja con ellos como profesionales y por tanto con la empresa y cada uno de los equipos a los que pertenecen.

¿Cree que es posible alcanzar puestos de liderazgo en el mundo empresarial sin cultivar un perfil público?

En muchos casos, un perfil de liderazgo va acompañado por otras habilidades como la conexión con las personas, las relaciones públicas, pero muchos otros líderes no tienen estas características o no cultivan tanto su perfil público, y sin embargo son líderes intachables. Sin duda son atributos importantes, y es un modo inteligente de elevar tu perfil, pero sí creo que es posible alcanzar posiciones relevantes en el mundo empresarial sin trabajar tanto la parte de la “marca personal”. 

Más allá de techos de cristal o de frenos externos, también existen los frenos que nos autoimponemos las propias mujeres. ¿Cómo podemos las mujeres superar de una vez esas autolimitaciones y empezar a creérnoslo? ¿Qué herramientas pueden ser útiles en ese sentido?

Efectivamente, las mujeres tendemos a ‘autosabotearnos’, por desgracia. Lo importante es creer que somos capaces. La autoestima es algo que muchas veces falla, tanto en el género femenino como en el caso de los hombres, esto me preocupa y ahí es donde tenemos que trabajar, tanto para entornos tecnológicos como en cualquier otra profesión.  Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que no solo las mujeres tendemos a sufrir esta especie de “síndrome del impostor”, sino que los hombres también lo hacen y esto se debe a que hoy en día vivimos en un mundo competitivo que, en ocasiones, nos exige demasiado y nos impone estándares que diría que son casi inalcanzables. Para eso yo pienso que todos debemos ser nosotros mismos, proponer nuestras ideas, por más locas que parezcan, y, sobre todo, apoyarnos siempre en nuestros equipos.

Más allá de las capacidades innatas con las que nacemos cada uno, el liderazgo también es algo que se puede estimular y trabajar. ¿Cómo pueden las empresas reforzar esas habilidades en sus trabajadoras?

Las organizaciones tienen un papel fundamental a la hora de reducir la brecha de género y acompañar el crecimiento de las mujeres dentro de una empresa. Nuestro sector tiene una gran oportunidad para fomentar la inclusión y la diversidad en la industria, elementos clave para la innovación. En Globant creemos que una persona puede ser capacitada para hacer aquello a lo que aspira en su carrera, y si ser líder es parte de sus anhelos y sueños lo puede lograr. Si lo quieres, entonces ve a por ello.Lo principal para convertirse en líder son las ganas y la motivación para lograrlo. No se trata de tener un rasgo específico o seguir una guía, porque cada proceso y cada persona es diferente, no hay razón para limitarse o no aspirar a alcanzar un puesto como este.