“Ha llegado el momento de dejar que la ficción tome las riendas de nuestra realidad”
Las recomendaciones de Laura Riñón, librera de Amapolas en Octubre, para el Día del Libro
“Amapolas en Octubre no es solo una librería. Es un hogar. Un refugio. Un espacio de encuentros y algún desencuentro novelesco”. Con esta tarjeta de presentación, uno ya va con la imaginación desbocada al adentrarse en este pequeño santuario literario, en el centro de Madrid. Laura Riñón Sirera es la extraordinaria mujer que regenta este negocio, que nació como idea en la novela homónima antes de que, como ella misma cuenta, el sueño se hiciera realidad: la librería abrió sus puertas en enero de 2019.
Zaragozana, del 75, Laura ha corrido muchas aventuras antes de asentarse en el número 60 de la madrileña calle Pelayo. Abandonó una carrera universitaria (Derecho) por la que no sentía verdadera vocación, fue azafata durante más de veinte años y también coach hasta que decidió que había llegado el momento de centrarse en su gran pasión: la literatura. No sorprenden tantas aventuras cuando ella misma confiesa su debilidad por Jo March, la joven, apasionada y valiente aspirante a escritora de la siempre eterna Mujercitas, su libro de cabecera desde los años de adolescencia.
La autora del libro de relatos Dueño de tu destino (premio Éride 2014) y las novelas Todo lo que fuimos (premio Éride 2015) y Amapolas en octubre (premio Tres hermanas, 2019) y El sonido de un tren en la noche (recién publicada), charla con Mujeres a Seguir a pocos días de celebrarse el Día del Libro, este año de manera excepcional el 23 de julio.
Como escritora, librera y lectora, ¿cómo le ha afectado hasta ahora la crisis de la COVID-19?
En todos los sentidos, porque ha afectado a mi vida personal, que es la esencia de la librera, la lectora y la escritora. Mi capacidad de concentración fue nula durante las primeras semanas, así que me dediqué a releer y dejé los libros pendientes para más adelante. La librería ha cambiado en dos meses, he sucumbido al presente inevitable y la venta on line ya forma parte de mi día a día, esta ha sido la mejor decisión que he podido tomar para seguir adelante. Los lectores siguen existiendo y, además, se han volcado en el apoyo a las pequeñas librerías.Mientras esto ocurra seguiremos con vida. Y como escritora, mi nueva novela, El sonido de un tren en la noche, se quedó “secuestrada” y ha visto la luz tres meses después. Es curioso pensar cómo se recibirá la historia después de lo vivido. Las sensibilidades han cambiado y esta nueva novela habla mucho de emociones.
¿Qué ha supuesto para usted la suspensión de la Feria del Libro de Madrid?
Me ha afectado más como escritora, porque es nuestra fiesta más esperada y no poder celebrarla es una pena. Como librera, he decidido montar una feria alternativa para que escritores y lectores disfruten de su encuentro. El sector se recuperará, pero es evidente que hay que aceptar que hay que hacer cambios. Las novedades, por ejemplo, deben reducirse, llevamos años con exceso de títulos y creo que deberíamos aprovechar este momento para cambiar la manera de publicar.
Recomiéndenos una novedad editorial. Y por qué.
¿Una? Ava en la noche, de Manuel Vicent, porque leer a Vicent para mí es volver a casa.
Recomiéndenos un título clásico o reciente. Y por qué.
El infinito en un junco, de Irene Vallejo, sobran los motivos.
¿Cuál es su personaje de ficción favorito?
Jo March [Mujercitas]. Pasión, valentía y literatura.
Un mensaje de optimismo para estos tiempos de crisis.
Ha llegado el momento de dejar que la ficción tome las riendas de nuestra realidad, debemos confiar en nuestros instintos y en nuestras ilusiones para salir adelante. El optimismo se contagia, creo que debemos dejar de buscar culpables de nuestra situación y comenzar a ser responsables de nuestras decisiones. Es momento de reinventarse, sin perder nuestra esencia.
