Dior lleva su mensaje feminista un paso más allá
La nueva colección de Maria Grazia Chiuri volverá a dar que hablar: en esta ocasión plantea una reflexión sobre el papel de la mujer en el mundo del arte

Cuando en julio de 2016 se anunció el nombramiento de Maria Grazia Chiuri como directora creativa de Dior, todos los medios destacaron que la italiana sería la primera mujer al frente de la maison en sus 69 años de historia (Raf Simons, John Galliano, Gianfranco Ferré, Yves Saint Laurent y, por supuesto, Christian Dior, fueron sus predecesores). Un par de meses después la italiana presentó su primera colección para la firma, convirtiendo sus camisetas con el mensaje Todos deberíamos ser feministas –una referencia al célebre ensayo de la escritora Chimamanda Ngozi Adichie—, en todo un fenómeno.
En realidad, Chiuri no fue la única diseñadora que reivindicó el feminismo. Inspirados por la Marcha de las Mujeres de Washington y todo el movimiento antiTrump, muchos de los diseñadores que desfilaron en Nueva York o Milán el año pasado llevaron la protesta a sus colecciones. Tracy Reese, por ejemplo, invitó a cuatro poetas, incluida su hermana Leslie, a leer durante el desfile. Solo les había dado una instrucción: todos los poemas debían contar historias de mujeres. Mara Hoffman también pidió a cuatro de las organizadoras de la Marcha de Washington que recitaran versos de Angela Davis, Maya Angelou o Audre Lorde. Prabal Gurung y Christian Siriano sacaron a la pasarela camisetas con leyendas como El futuro es femenino, No seremos silenciados, Mi novio es feminista o Soy una inmigrante. Las modelos de Public School lucieron una versión de las gorras rojas del presidente Trump sustituyendo el mensaje Make America Great Again (Haz América grande otra vez) por Make America New York, reivindicando que el país debería parecerse más a esta ciudad, levantada por inmigrantes y aún hoy crisol de culturas.
En Milán, las modelos de Missoni desfilaron con el gorro rosa símbolo de la Marcha de las Mujeres. La propia Angela Missoni cerró el desfile, acompañada por su familia, con un discurso en el que defendió que la que la moda debía apoyar los derechos humanos, la libertad y la democracia, y pedía a la comunidad de la moda que “demostrara al mundo que está unida y no tiene miedo”. Maria Grazia Chiuri no fue, en definitiva, la única, pero sí la que más visibilidad obtuvo. También la que más camisetas vendió, a pesar de su prohibitivo precio. Tanto es así que las cadenas de low cost vieron el filón y llenaron sus tiendas con sus propias versiones de prendas con estampados reivindicativos.
El feminismo se convirtió en tendencia, generando diversidad de opiniones. Están los que defienden que la moda es parte de la cultura, que es natural que beba de los movimientos sociales y que todo lo que sea visibilizar el feminismo es positivo. Y hay quien considera que las marcas se están aprovechando del movimiento y frivolizando con una cuestión seria.
Sea como fuere, con su colección para la primavera-verano 2018, presentada ayer en París, María Grazia Chiura ha demostrado que su acercamiento al feminismo no era solo flor de una temporada. En esta ocasión, los asistentes al desfile se han encontrado en sus asientos con una copia de ¿Por qué no ha habido grandes mujeres artistas?, el ensayo publicado en 1971 por Linda Nochlin: un análisis de la historia del arte desde el punto de vista feminista que propone que grandes creadoras ha habido siempre, el problema es que estas han sido sistemáticamente ignoradas por el sistema a lo largo de la historia. La modelo rusa Sasha Pivovarova abrió el desfile con una camiseta con el título de la obra. La segunda gran referencia de la colección ha sido la artista francesa Niki de Saint Phalle, cuya obra, ha reconocido la propia Chiuri, ha influido fuertemente la estética y el espíritu de su nuevo trabajo.
La firma ha colgado también un vídeo en internet en el que, sobre imágenes de su taller de costura, una voz (masculina) indica que los los hombres "ya se han expresado suficiente en los siglos pasados" y, en cambio, "las mujeres tienen mucho que decir y algo nuevo que poner sobre la mesa" ahora.