Te vas a hacer muy fan de las cholitas escaladoras de Bolivia
Son un colectivo de mujeres indígenas que escalan los picos más altos de Los Andes vestidas con sus trajes tradicionales
Durante mucho tiempo sufrieron el machismo y la discriminación, pero en los últimos años, las mujeres de ascendencia aimara han protagonizado un movimiento reivindicativo, que empezó por convertir el término ‘chola’, utilizado hasta entonces de forma despectiva, en un signo de orgullo.
Lo mismo ha sucedido con su vestimenta tradicional: amplias faldas (conocidas como polleras), chales y mantones sobre la blusa y el largo pelo recogido en trenzas. Hasta hace no mucho las mujeres que quisieran hacer carrera en la universidad, la empresa o en la administración pública tenían que dejarla en el armario, pero en los últimos años las mujeres indígena han recuperado las polleras como símbolo de su identidad. No las abandonan ni siquiera para escalar montañas.
Desde hace un par de años hay un colectivo de Cholitas escaladoras que, bajo el lema ‘Querer es poder’, se dedican a escalar algunos de los picos más altos de los Andes. Con cascos y botas, pero también con enaguas y faldones. Aseguran que subir montañas les ayuda a sentirse más libres. Cuando empezaron lo hicieron casi sin preparación, solo sabían lo que habían aprendido viendo a sus parejas, algunos de los cuales son guías profesionales. Después se han ido formando con cursos de escalada y seguridad en la montaña.
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Política de cookiesVer en youtube.comTras haber conquistado picos como el Illimani, el Acotango, el Parinacota o el Huayna Potosí, se han planteado el reto de escalar la montaña más alta de América, el Aconcagua, situada en Argentina, cerca de la frontera con Chile. La productora española Arena está produciendo un documental que cuenta su aventura. De momento solo se puede ver el tráiler del proyecto.

Bolivia es uno de los países con las tasas de violencia contra las mujeres y los niños más altas de América Latina. En la primera mitad del año se produjeron 61 feminicidios, según datos de la Fiscalía General del Estado. En 2017 fueron asesinadas 109 mujeres a manos de sus parejas.