La igualdad no llegará a las empresas españolas hasta 2037
Hombres y mujeres coinciden en que ellas todavía se enfrentan a obstáculos, pero difieren en cuáles son

En España, solo el 27% de los puestos directivos están ocupados por mujeres, según el Informe Woman in Business de la consultora Grant Thorton, que se ha presentado esta mañana. El dato representa un crecimiento del 1% respecto a 2016 y confirma, como demuestra el gráfico incluido más abajo, que el progreso de la mujer en la alta dirección de las empresas españolas se ha estancado en los últimos años. Para María José Lázaro, socia de la firma, esto se debe a que las empresas han caído en cierta complacencia y “lo que se conoce como la fatiga de la diversidad”, es decir, que han perdido el impulso de seguir incorporando mujeres en la alta dirección, “considerando que una vez hecho el primer esfuerzo no hay que hacer nada más”.

Pese a todo, España está ligeramente por delante de la media de la Unión Europea (26%) y también de la media mundial (25%). Pero lejos de los países con más mujeres directivas, como Rusia (47%), Indonesia (46%), Estonia, Polonia y Filipinas (40%) y Lituania (37%). En el extremo contrario están Japón (7%), Argentina (15%), India (17%), Alemania (18%) y Reino Unido (19%).
Casi más preocupante es que a nivel mundial el porcentaje de empresas sin mujeres directivas ha aumentado, pasando del 33% al 34%. Rusia es el único país de los analizados que tiene féminas en las cúpulas de todas sus empresas. El dato español (22%) es menos malo, sobre todo si lo comparamos con el de hace cinco años: el porcentaje de empresas que no tenían ninguna directiva era entonces del 32%.
Un 84% de los hombres directivos en España admiten que existen barreras que impiden el avance de la mujer en las compañías. Tanto ellos como ellas tienen en mente las mismas soluciones para aumentar su presencia: medidas de flexibilidad laboral y conciliación, transparencia en los procesos de selección y programas de fomento de la carrera profesional como cursos de liderazgo, mentoring y formación. “Mujeres y hombres coinciden en la necesidad de que España acometa cambios culturales profundos para que haya más jefas, sobre todo en el reparto de los roles familiares y sociales”, explica Isabel Perea, otra de las socias de Grant Thornton.
El 75% de las mujeres cambiaría esa cultura, poniendo mayor énfasis en la diversidad y la valoración de los distintos tipos de liderazgo no exclusivamente masculinos. Llama la atención, además, que la mitad de mujeres encuestadas creen necesario cambiar su propia actitud para lograr llegar a puestos directivos, mientras que solo el 25% de hombres ven necesario que las mujeres cambien su forma de pensar.
Para ellas, el cuidado de los hijos y las presiones familiares (83%) es lo que más las frena a la hora de apostar por una carrera directiva, mientras que ellos piensan que la escasez de estructuras de apoyo para la conciliación es el factor decisivo (66%). Pero la mayor discrepancia se produce a la hora de valorar si la cultura empresarial española, predominante masculina, es una barrera o no: un 83% de las mujeres así lo indican, frente al 49% de hombres. También hay grandes diferencias en cuanto a los prejuicios de género, muy importantes para ellas (67%), pero no tanto para ellos (33%). Y en cuanto al efecto disuasorio de la brecha salarial, es una barrera para un 54% de mujeres, pero solo para un 22% de hombres.
