Las sorprendentes vidas de nueve pioneras del deporte español
Algunas han tenido más reconocimiento, a otras es probable que no las conozcas, aunque todas fueron campeonas

Mireia Belmonte, Carolina Marín, Lydia Valentín o Laia Sanz son algunas de las deportistas que en la actualidad hacen la historia del deporte español, pero mucho antes que ellas, otras mujeres lograron destacar en distintas disciplinas abriendo caminos para las nuevas generaciones.
Lilí Álvarez
Aunque su nombre estará para siempre vinculado al tenis, Álvarez fue también una amante de los deportes de invierno. De hecho, fue convocada para participar en los Juegos Olímpicos de 1924 en la disciplina de patinaje sobre hielo, aunque una lesión le impidió participar. Decidió entonces centrarse en el tenis y ese mismo año se convirtió en la primera española en participar en unas Olimpiadas de verano. En los años veinte llegó a la final de Wimbledon en tres ocasiones y ganó dos Roland Garros, en dobles y dobles mixtos. Álvarez también rompió moldes con su forma de vestir. Fue la primera tenista que utilizó falda pantalón en un torneo, todo un escándalo para la época. También practicó equitación, alpinismo o esquí, llegando a proclamarse campeona de España de esquí alpino en 1940.

Mari Paz Corominas
Antes de Mireia Belmonte, nuestra nadadora más destacada había sido Mari Paz Corominas, que en 1968 se convirtió en la primera española en disputar una final olímpica. Acabó en séptima posición en los 200 metros espalda. Solo tenía 16 años. De pequeña, Corominas solía practicar natación los fines de semana y cuando comenzó a destacar en espalda, su familia la apuntó al Club Natación Sabadell. Entre 1966 y 1968 logró dos títulos nacionales y la medalla de oro en los Juegos del Mediterráneo de Túnez. A los 18 años, y tras disputar en Barcelona los Campeonatos de Europa de 1970, se retiró de la competición profesional. Su carrera fue breve, pero dejó huella en el mundo del deporte español.

Carmen Valero
Considerada la mejor atleta española del siglo XX, fue la primera española que corrió en unos Juegos Olímpicos, lo hizo en Montreal 1976, en las pruebas de 800 y 1.500 metros. Empezó en este deporte con doce años, cuando su padre la llevó a la pista de atletismo de Sabadell. Allí conoció al entrenador Josep Molins, que la metió en el club Juventud Atlética. Fue campeona de España de campo a través en ocho ocasiones y logró dos títulos mundiales de cross en Chepstown (Gran Bretaña) 1976 y Dusseldorf (Alemania) 1977. Además, superó quince récords nacionales.

Blanca Fernández Ochoa
España solo ha sumado cuatro medallas en los Juegos Olímpicos de Invierno y una pertenece a una mujer, la recientemente fallecida Blanca Fernández Ochoa. Desde muy joven, con tan solo 11 años, Fernández Ochoa comenzó a formarse como esquiadora. Se trasladó a un centro de entrenamiento para deportistas en Lleida junto a alguno de sus hermanos para intentar seguir los pasos del mayor de todos, Francisco, que en 1976 se había proclamado campeón olímpico de eslalon de esquí alpino en los Juegos de Sapporo. Blanca fue la única que lo logró. En 1992 se alzó con una medalla de bronce en los Juegos de Albertville. No fue su único hito, aunque sí el mayor que consiguió. En 1985 ganó su primera prueba de la Copa del Mundo, en el eslalon gigante de Vail (Estados Unidos). Seguirían otras tres victorias: Sestriere 87 (Italia), Morzine 90 (Francia) y Lech 91 (Austria).

Arantxa Sánchez Vicario
En febrero de 1995, Arantxa Sánchez Vicario se convirtió en la primera española en ocupar el número uno del tenis mundial. Esto coincidió con su primera posición en la categoría de dobles, lo que la convirtió en la segunda tenista de la historia en conseguir simultáneamente el número uno en ambas categorías. A lo largo de su carrera, Sánchez Vicario ganó tres veces Roland Garros (1989, 1994, 1998) y una el US Open (1994), además de seis grand slams en dobles y cuatro en dobles mixtos. También logró cuatro medallas olímpicas y cinco títulos de Copa Federación con el equipo español. Arantxa Sánchez Vicario empezó en el tenis siguiendo los pasos de sus hermanos Emilio y Javier. Ella comenzó a jugar a los 4 años y con 14 se hizo profesional.

Miriam Blasco
La judoca Miriam Blanco fue la primera deportista española en lograr una medalla en unos Juegos Olímpicos de verano, además de la primera en conseguir un oro olímpico. Lo hizo en Barcelona 1992. Esa medalla no solo la hizo entrar en la historia del deporte de nuestro país, también marcó su vida personal. Su rival en esa final olímpica, la británica Nicola Fairbrother, acabó por convertirse en su mujer. Blanco también ganó dos medallas en el Campeonato Mundial de Judo en los años 1989 y 1991, y cinco medallas en el Campeonato Europeo de Judo. Tras retirarse de la vida deportiva, se pasó a la política como senadora por Alicante del PP.

Conchi Amancio
Pionera del fútbol femenino en nuestro país, Conchi Amancio se interesó desde pequeña por este deporte tradicionalmente masculino. A los 15 años, un equipo italiano, el Gamma 3 de Padua, la fichó, y desde entonces los estadios italianos se convirtieron en su terreno de juego. Allí logró varias ligas y copas con diferentes clubes. También llegó a ser la primera capitana de la Selección Española de Fútbol Femenino en 1971, aunque por aquel entonces el equipo no competía de forma oficial, ya que la Federación aún no reconocía el fútbol femenino. Tuvo que pasar más de una década para que esto pasara. Amancio pasó toda su carrera luchando por los derechos de las jugadoras y por situar el fútbol femenino en su lugar. En 2010, ya retirada de la competición profesional, creó una escuela de fútbol para chicas en Inglaterra, el Filton College de Bristol.

Coral Bistuer
Cuando el taekwondo era un deporte desconocido para la mayoría de los españoles, ella lo puso en el mapa. Coral Bistuer se alzó con dos medallas olímpicas, un bronce en Seúl 88 y el oro en Barcelona 92, cuando todavía era un deporte de exhibición (hasta el año 2000 no fue olímpico). Ella comenzó a practicar taekwondo a los 15 años. Al poco tiempo participó en el Campeonato de Castilla y en 1980 consiguió la medalla de bronce en el Campeonato de España. Durante su carrera deportiva logró alzarse con dos medallas en el Campeonato Mundial de Taekwondo en los años 1987 y 1991, y cinco medallas en el Campeonato Europeo de Taekwondo entre 1982 y 1992.

Edurne Pasabán
La alpinista vasca Edurne Pasabán ha sido la primera mujer en el mundo en coronar los catorce ochomiles (las montañas de más de 8.000 metros de altura que existen). Completó la gesta en nueve años: su primer reto fue el monte Everest en mayo de 2001 y cerró la hazaña escalando el Shisha Pangma en mayo de 2010. Es, además, una de las cinco mujeres que hasta la fecha han logrado escalar el K2. Su trayectoria desde que comenzase a interesarse por el alpinismo con 14 años ha sido imparable. Sus primeras ascensiones las realizó en los Pirineos, los Alpes o los Andes. Y a los 16 coronó el Mont Blanc, el Cerviño y el Monte Rosa, todas montañas de más de 4.000 metros de altura.
