Desde el pasado viernes y hasta el próximo 21 de mayo se exhibe en Team Labs (C/Duque de Alba 15 de Madrid) la exposición Algunos Techos Rotos, organizada por el Club de Creativos con la colaboración de Mujeres a Seguir. La muestra reúne 30 retratos de mujeres (ingenieras, biólogas, médicas, investigadoras, artistas, juezas, empresarias y directivas) que han triunfado en su profesión, retratadas por otras tantas creativas que forman parte del club. Algunas de las autoras y las retratadas participaron en una mesa redonda titulada Mujer y liderazgo y celebrada el jueves por la tarde coincidiendo con su inauguración.

Fue moderada por la periodista Pilar Portero, que comenzó pidiendo a las participantes que contaran alguna situación de discriminación por su sexo que hubiesen experimentado a lo largo de su carrera. Ninguna de las presentes se había sentido objeto, según comentaron, de ninguna afrenta demasiado grave en ese sentido, aunque sí refirieron algunas situaciones expresivas. Así, Ana Hidalgo comentó que nunca se había sentido marginada en su trabajo por el hecho de ser mujer pero que ella misma se había limitado en la faceta del networking, de dejarse ver y relacionarse en los eventos de la profesión, faceta que según su punto de vista los hombres han cuidado siempre más, lo que tiene como efecto una menor visibilidad para las mujeres creativas. Marga Castaño, profesional que también trabaja en creatividad publicitaria, señaló que su experiencia en agencias indica que a veces los clientes simplemente no ven, o no veían a las mujeres creativas y que no tenían la misma consideración para con ellas que con los hombres.

También a la invisibilidad se refirió Inés Alberdi, catedrática y exdirectora del Fondo de las Naciones Unidas para las Mujeres. Recordó que en sus primeros tiempos de profesora universitaria organizó una sesión docente en un seminario; se encontraba esperando a los alumnos en la estancia y cuando estos abrieron la puerta y la vieron junto a la secretaria, uno dijo “Aquí no hay nadie”. Al fin volvieron y según dijo Inés Alberdi, comentaron lo sucedido, “y resultó muy formativo, sirvió para poner de relieve que a las mujeres en determinadas situaciones no se las ve, lo que ahora sigue pasando”. La jurista Adela Asúa, vicepresidenta hasta el pasado mes de marzo del Tribunal Constitucional, recordó la frustración que le supuso no estudiar Medicina y el hecho de que en su familia no le dieran demasiada importancia a su vocación frustrada –“elegí Derecho a regañadientes”-, incidió en el tema de la visibilidad y reconoció que “a veces somos las propias mujeres las que no nos vemos en determinados puestos, y es una cuestión inconsciente, producto de las percepciones que dominan en la sociedad”.