"MeToo es una brillante explosión de ira, poder y valor, y además es solo el principio"
Entrevistamos a la escritora Elizabeth Gilbert, autora de ‘Come, reza, ama’
Hace unos años, Elizabeth Gilbert era una reputada periodista que escribía regularmente para revistas como Esquire, Harper's Bazaar, The New York Times Magazine o GQ. Pero en un momento dado se dio cuenta de que no era feliz y estaba atrapada en un matrimonio rutinario. Así que resolvió divorciarse y emprender un viaje de autodescubrimiento que la llevó por Italia, India e Indonesia. La experiencia le permitió, además de encontrarse a sí misma, escribir un libro del que se vendieron diez millones de copias en todo el mundo e inspiró una película protagonizada por Julia Roberts. Ese libro, Come, reza, ama, se convirtió en un fenómeno cultural y social que ha inspirado a muchos (y especialmente muchas) a seguir sus pasos y tratar de reconducir sus vidas. Gilbert se convirtió entonces en una suerte de gurú del desarrollo personal. Después ha seguido publicando libros —de esos que se suelen incluir en la categoría de autoayuda, pero también novelas, de relatos, ensayo y hasta de cocina— y viviendo intensamente. En 2016, tras doce años de matrimonio con el hombre que había conocido durante su gran viaje (el que interpretaba Javier Bardem en la película), Gilbert anunciaba su divorcio. Meses después, la escritora revelaba en Facebook que tenía una relación sentimental con la que durante una década había sido su mejor amiga, y que esta tenía cáncer. Durante el largo tratamiento al que se había sometido, la relación entre ambas se había ido estrechando hasta convertirse en pareja. El pasado enero, Gilbert anunciaba, de nuevo vía Facebook, la mala noticia: su pareja había fallecido.
La próxima novela de la escritora, que tratará sobre las coristas del Nueva York de los años cuarenta, se publicará el año que viene. Antes, el próximo mes, Elizabeth Gilbert visitará nuestro país para participar en el Being One Forum, el mayor congreso sobre crecimiento personal y mindfulness de Europa, que tendrá lugar en Valencia del 12 al 14 de octubre.
¿Por qué crees que Come, reza, ama se convirtió en el fenómeno que fue?
¡Ojalá lo supiera! De ser así, lo haría de nuevo. Sospecho que tiene algo que ver con una fantasía de muchas mujeres: alejarse de todo para dedicarse a sí mismas. Las mujeres llevan el mundo sobre sus hombros, pero no suelen llegar a explorarlo. Me encanta escuchar historias de mujeres que cambiaron sus vidas y tomaron grandes riesgos después de leer mi libro.
Has probado distintos géneros, pero se te suele identificar como autora de autoayuda. ¿Te molestan los prejuicios que tienen algunas personas respecto a este tipo de obras?
Tengo casi 50 años y he llegado a una edad en la que realmente apenas me importa lo que la gente diga o piense de mí. Y digo "apenas" porque de vez en cuando me importa, pero solo cuando son opiniones de personas a las que amo y respeto. En cuanto al resto, me complace informar de que ya ni siquiera hace mella en mi conciencia. Simplemente hago lo que quiero, y el resto del mundo es libre de pensar lo que quiera.
¿Crees que las mujeres seguimos demasiado preocupadas por el fracaso? ¿Más que los hombres?
Honestamente, creo que no conozco a ningún humano, hombre o mujer, que esté relajado y a gusto en el mundo y en su propio cuerpo. Creo que los hombres son mejores a la hora de ocultar su miedo y ansiedad, porque les han enseñado a usar una máscara de dureza. Pero puedes asumir que toda la gente a la que conoces tiene miedo. Todos piensan que no son lo suficientemente buenos, que tienen algo malo. Absolutamente todos, excepto un puñado de personas completamente iluminadas, y son muy pocas. El mundo sigue siendo, en general, un lugar más fácil para los hombres que para las mujeres, pero eso no significa que los hombres sean más felices o estén más relajados. Siento compasión por todos, porque todos batallamos con nuestros propios dilemas.
En alguna ocasión has dicho que cuando escribías sobre hombres recibías premios, y cuando empezaste a escribir sobre mujeres etiquetaron tu trabajo como ‘literatura para chicas’. ¿Es el mundo de la escritura sexista?
Por supuesto que sí, pero solo porque el mundo entero es sexista. También es cierto que el mundo es racista. O que favorece a las personas ricas con educación sobre los pobres sin educación. Vivimos en un mundo injusto. Dicho esto, es el mejor momento en la historia de la humanidad para ser mujer, especialmente si vives en el mundo moderno, industrializado y occidental. Mis ancestros femeninos habrían matado por tener la libertad y el poder que tengo yo. Creo que la mejor forma de honrar a esas antepasadas mías que nunca tuvieron mis oportunidades es salir al mundo y patear tantos culos como pueda.
Mucha gente no sabe que Coyote Ugly (El Bar Coyote) se basa en un artículo que escribiste sobre tu experiencia como bailarina de barra. ¿Te imaginas la respuesta que hubiera tenido la película o incluso el artículo en la era del #MeToo?
Escribiría ese artículo exactamente de la misma manera hoy que hace veinte años. Nunca fue una historia sobre mujeres abusadas, usadas o dañadas. Era una historia sobre algunas mujeres realmente poderosas y muy interesantes que navegaban por el mundo de los hombres de una manera audaz y seguras de sí mismas. La propietaria de ese bar sigue siendo una de las mujeres más geniales y duras que he conocido en mi vida. No estuve a cargo de la película, por lo que no puedo hablar de ese aspecto, pero mi historia habría sido la misma.
Por cierto, ¿cómo has visto la evolución del movimiento #MeToo?
Creo que es una brillante explosión de ira, poder y valor, y además esto es solo el principio. Llega con retraso, pero no importa, va a seguir avanzando y ganando terreno.
Hace unos meses hiciste público que había fallecido tu pareja. Si no te incomoda la pregunta, ¿cómo te encuentras?
Me siento tal y como podrías esperar que me sintiera. Sobrellevo el duelo con todo el coraje, la apertura y la gratitud que puedo. Creo que todo irá bien siempre y cuando nuestros corazones y mentes no se cierren.
